Mientras que los alarmistas cumbiavillerófilos y reggaetonófilos denuncian que la escena rock ha perdido significado y se ha vendido a los mensajes fáciles pero ricos en auspiciantes, la esperanza está en el under (¡oh, almácigo infinito de entusiasmos testarudos y con mal sonido!). La nueva novedad underground se llama Lenguas Vivas, y es el secreto mejor ignorado de la escena hip-hop local, ya que su mensaje feroz da nombres, denuncia y golpea “a todos los grupos de poder”. O al menos, eso aseguran los Lenguas Vivas en las entrevistas, en las que sostienen que sus temas “castigan con virulencia a poderosos como los empresarios del rock, los gurúes de la economía, los funcionarios del gobierno, los líderes sindicales corruptos, los rockers cincuentones absorbidos por el sistema, los supermercadistas chinos o los peluqueros que siempre te cortan un poco más de lo que vos querías”.

Sin embargo, ese supuesto contenido crítico no resulta fácil de hallar en la música de Lenguas Vivas, que no tiene letra y es ciento por ciento instrumental. “El mensaje está ahí, latente entre las bases y los scratches, sólo hay que decodificarlo”, afirma el cantante Mr. Lenguado, quien durante los shows permanece en silencio, cruzado de brazos, pero acompañando el ritmo febrilmente con la cabeza. “Nosotros nos callamos lo que muchos dicen”, añade el otro vocalista, Dr. Mudo, famoso por ni siquiera asistir a los conciertos de la banda.

Su álbum debut (Mejor ni te digo, 2008) dispara sin piedad hacia todos lados, como la canción Mi mensaje, cuya letra... no dice nada. ¿Concepto o enigma? “El desafío del hip-hop actual pasa por callarse la boca”, reflexiona el prescindible frontman Dr. Mudo, quien asegura que “la verborragia de los MC llevó al rap a un callejón sin salida; hoy cualquier letra de hip-hop resulta más larga que el Nuevo Testamento”. Es que todos los integrantes de Lenguas Vivas comparten un pasado en bandas de rap convencional como Rima Fácil, BlaBlaBla² o Parlantes. “Dijimos tantas cosas que nos quedamos sin letra”, cuenta Mr. Lenguado con tono dramático, y ejemplifica: “En 2004 el afán por encontrar nuevas musas hasta nos llevó a componer un tema con 36 estrofas dedicado a un eructo... y con tal de agregar versos, terminamos forzando rimas con ‘acueducto’, ‘producto’ o ‘tratamiento de conducto’”. Bienvenidos al drama del rap argentino.

* Cualquier parecido con la realidad es una mera coincidencia que prueba cuán vulnerables somos ante los caprichos del azar.