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Capitanes de la industria
POR ANDRES CALAMARO
¿Cuál es el enemigo, la ultraderecha, la religión, o unos cuantos jugadores de fútbol? Tengo simpatía por algunos futbolistas y por algunosartistas, y muchos de ellos son ingleses. En ese sentido, Inglaterra es uno de mis países favoritos. Guiarse por camisetas para separar pueblos es peligroso.
Lo lindo del Mundial es que te gustan jugadores de muchos equipos: miren a Paraguay, con Acuña, Gamarra y Chila en la tribuna. Y lo bueno de la Selección es que es “Argentina” y no “argentinos”. Estos jugadores son capitanes de la industria en Europa, como yo. Son caballeros con doble nacionalidad, y llevan el pelo atado porque son rockeros, no soldados. Tengo historias sentimentales muy bonitas con muchos de ellos, partidos de truco los viernes, en España... Miren al Piojo, o a Zanetti, ¡un pibe de Banfield, capitán del Inter! Yo quisiera ser una mujer vieja sólo para ser la suegra de Zanetti.

No alentar rivalidades
POR BOOM BOOM KID
El fútbol me da lo mismo. Con los Fun People estuvimos en Inglaterra, y tocamos en el bar del club Notthingham Forest. Decíamos “va a ser re-heavy, nos van a preguntar de fútbol, no vamos a cazar una”. Pero nada, ni un comentario. Y nos imaginábamos qué pasaría si una banda under inglesa fuera a tocar en un club de fútbol argentino... ¡los cagarían a trompadas! Si el Mundial te pone feliz, súper; pero si te pone violento, todo mal. No se puede odiar a alguien porque es de otro país, o de otro club. Esos preconceptos no son buenos. ¡Si los jugadores cambian de equipos todo el tiempo! Creo que los dirigentes de fútbol deberían organizar fiestas y no alentar las rivalidades. Propongo: “Hoy, Boca Juniors invita a Estudiantes a comer una pizza”.