“Lo que estás a punto de leer es real. Los nombres no han sido modificados porque, de lo contrario, la historia no tendría gracia”, avisa The Washington Post a la hora de relatar la historia de Kevin Lee Cokayne, un hombre de 24 años que fue detenido por traficar drogas. ¿Cuál habrá sido el primer indicio? Con todo, y más allá de lo que el denominador sugiere, el norteamericano solo vendía marihuana.

El arresto ocurrió el pasado 22 de marzo, cuando la policía de Fairfax County fue al sótano que el joven alquilaba en la calle Franklin Road, en el barrio de Herndon, en Virginia y –orden de allanamiento mediante– encontró una caja fuerte, otra de madera y dos frascos repletos de marihuana, al igual que un dispositivo para fumarla, una balanza digital y registro y documentos comprometedores.

Al parecer, el reporte policial –que devino en dos cargos por distribución– tuvo que escribirse varias veces porque, a la hora de anotar el apellido del malhechor, los oficiales escribían “Cocaine” (cocaína en inglés) en vez de C-o-k-a-y-n-e, como verdaderamente se deletrea. Previo a la detención, un agente encubierto –seguro de encontrar algo más fortachón que weed– le había pedido registrar el lugar, pero el dealer se negó: “No veo por qué perder el tiempo en un delito menor”, le habría dicho al oficial.

Irónicamente, en la página de Facebook de Kevin Lee aparece la imagen de una bola 8 de pool... Y eight-ball es como comúnmente se llama a los 3,5 gramos de cocaína en slang norteamericano. Hazte fama... O cámbiate el apellido.