De las múltiples asociaciones libres de las que surgen potenciales teorías, la que han comenzado a pergeñar algunos psicólogos por el mundo resulta francamente desmedida. A tal punto Facebook se ha convertido en una fuerza social dominante que varios especialistas de la mente y un creciente número de empleadores creen que las personas que no están asociadas al sitio son “sospechosas”.

El ejemplo más extremo lo ofrece la revista alemana Der Taggspiegel que, tras consultar a especialistas, señala que tanto el tirador de Denver James Holmes como el asesino de masas noruego Ander Behring Breivik no tenían perfiles en la red social. El sitio de noticias de tecnología Slashdot adhiere y resume la historia de la siguiente manera: “No tener una cuenta de Facebook podría ser el primer signo de que usted es un asesino de masas”.

Alimentando la hipótesis, el psicólogo Christopher Moeller dijo a la publicación que el uso de esta web se ha convertido en signo de una vida social saludable; no usarla significaría —entonces— una marca de anormalidad y disfuncionalidad; incluso, peligro, considerando que los psicópatas seriales no suelen tener muchos amigos...

Al parecer, esta consideración no queda reservada al ámbito de la psicología; muchos empleadores —cuenta Forbes.com— también tienen sus recatos a la hora de contratar a una persona sin Facebook. Los departamentos de Recursos Humanos —explica— son “cuidadosos” con los jóvenes candidatos que no usan el sitio, asumiendo que el solicitante ha incurrido en comportamientos erráticos que lo han obligado a borrar su perfil.

Y siguen los llamados de atención. En una columna, la periodista de la revista Slate Emily Yoffree aconseja a la muchachada a no relacionarse amorosamente con gente que no use la página. “Si tienes una cierta edad, estás a punto de acostarte con alguien y esa persona no tiene Facebook, puede que estés recibiendo un nombre falso. Podría ser una señal de alerta”, escribe la mujer. ¿No será mucho?