Un jefe policial de la ciudad de Santa Fe fue atacado por un grupo de personas que se resistió a ser identificada, uno de los cuales le arrancó el lóbulo de una oreja de un mordisco. Curiosamente, el hecho ocurrió frente a la panadería que fue asaltada hace dos meses y los delincuentes encerraron a sus dueños y empleados en el horno. El policía agredido quedó internado en observación, mientras una patrulla policial detuvo a cuatro sospechosos.

El hecho se produjo cerca de las 23.30 del domingo último en Brasil al 4.500, en el populoso barrio Barranquitas Oeste de la ciudad capital, cuando el subcomisario Sergio Fernández, jefe de la Patrulla Urbana de la Unidad Regional I, llegó al lugar a bordo de un móvil, junto a un chofer,

para dar apoyo a dos agentes que estaban de guardia frente a la panadería El Fortín.

Se trata del mismo negocio que fue asaltado hace dos meses y los delincuentes encerraron a sus dueños y empleados en el horno. En su momento, tres delincuentes asaltaron la panadería y huyeron cargando con un jugoso botín y dejando a seis hombres encerrados en el horno del

establecimiento. Estos habrían muerto en pocos minutos de haber mediado la reacción de la dueña de casa ﷓que logró librarse de las ataduras﷓, y la rápida intervención policial. La decidida actuación de una mujer ﷓víctima de un asalto﷓, impidió -que seis hombres ﷓entre ellos su propio esposo﷓, hallaran horrible muerte encerrados en un horno de panadería.

Aparentemente, el oficial trató de identificar a cuatro hombres que se encontraban en un auto, quienes se resistieron al procedimiento y comenzaron a agredirlo, señalaron fuentes policiales.

Los mismos voceros dijeron que en esa circunstancia se produjo el forcejeo y uno de los integrantes del grupo mordió a Fernández y le arrancó el lóbulo de la oreja izquierda.

El grupo huyó de inmediato y el policía fue rápidamente trasladado al Hospital Provincial "José María Cullen", donde fue asistido y quedó internado en observación.

Personal del Comando Radioeléctrico montó un operativo y detuvo a cuatro hombres que serían los agresores, de 19, 27, 28 y 31 años.