La Dirección Provincial de las Mujeres ya tiene nueva responsable tras el alejamiento del cargo de la trabajadora social Beatriz Fullone La elección del gobierno recayó en otra trabajadora social, María Rosa Ameduri, una mujer con una extensa trayectoria de gestión y formación en temas de género y a la vez con experiencia en el ámbito de lo público. El ministro de Desarrollo Social Pablo Farías dijo a Rosario/12 que Ameduri -hasta el lunes pasado responsable de la Dirección Provincial de Formación de Recursos Humanos-, aportó de manera constante la perspectiva de género en las acciones y programas destinados a la capacitación. Farías volvió a señalar que la dirección creada este año continuará porque el trabajar en la promoción y cumplimiento de los derechos de las mujeres es una decisión política del gobierno santafesino y adelantó que en el 2009 esta repartición contará con presupuesto propio que ya fue incluido en el proyecto respectivo. Ameduri quien durante 8 años estuvo a cargo en Rosario del Hogar de Tránsito Alicia Moreau de Justo -dependiente del Area de la Mujer y para albergar a mujeres víctimas de la violencia y del programa de capacitación en oficios, también destinado a mujeres-, adelanta algunos aspectos con los que continuará la tarea iniciada por Fullone: foros regionales, formación de redes entre municipios y comunas, organizaciones no gubernamentales y la dirección a su cargo y capacitación permanente de quienes integran la diversidad de instancias intervinientes, entre ellas de la policía.

María Rosa Ameduri estuvo en el Area de la Mujer desde la primera gestión que correspondió a Rosa Acosta -actual secretaria de Derechos Humanos de la provincia- que siguió con la hoy diputada provincial Lucrecia Aranda y continuó Mariana Alonso, ahora concejala, hasta fines del año. En ese momento fue convocada y asumió la Dirección de Recursos Humanos del Ministerio de Desarrollo Social. La nueva directora de las Mujeres trae consigo la experiencia del hogar Alicia Moreau de Justo que la Municipalidad posee destinado al albergue de mujeres víctimas de violencia que llegan, a veces, con hijos pequeños, en busca de un espacio donde refugiarse, recomponerse y pensar cómo seguir la vida.

Aunque recién el pasado lunes dio una respuesta afirmativa a la propuesta del ministro del área, Pablo Farías, desgrana aquí algunas de las líneas de trabajo que continuarán con la tarea desarrollada por Beatriz Fullone, seleccionada entre muchísimos aspirantes para integrar el equipo de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. De ahí que Ameduri explica que para lo que resta del 2008 se trabajará en el armado de los foros regionales de mujeres. "Comparto la idea de Beatriz Fullone cerca de que hay que desplegar la tarea hacia el interior de las cinco regiones que componen la provincia, que hay que hacerlo de manera conjunta con municipios y comunas y que uno debe ir descubriendo o redescubriendo todos los grupos de mujeres que están trabajando en localidades grandes y pequeñas y que hasta ahora no tuvieron posibilidad de vincularse entre sí ni de acceder a los servicios de atención, asesoramiento y contención". Los ejemplos de Laguna Paiva, Esperanza o de las mujeres de la costa, en San Javier, son muestra de lo que dice.

-¿Cuál es entonces la propuesta desde la Dirección?

-El buscar un espacio de encuentro entre estos grupos y debatir las problemáticas regionales de las mujeres. No viven la misma realidad quienes habitan el norte, el centro o el sur, aunque todas tienen en común la existencia de espacios de discriminación o de violencia que las afectan. Pero el acceso que tienen a los servicios -en el ámbito de lo público o de las ongs.- y a los recursos para enfrentar esa violencia es distinto. Si como Dirección de las Mujeres logramos, ya durante el año que viene, que en todos los puntos de la provincia se generen instancias para el cumplimiento de la Ley de Violencia Familiar, estaremos garantizando muchas cosas.

-¿Qué significarían en concreto esas 'muchas cosas'?

-Que cualquier mujer que esté pasando por una situación de violencia familiar pueda estar comprendida efectivamente dentro de los artículos de la ley provincial ya reglamentada, tenga acceso a medidas autosatisfactivas, a que se relacione con algún grupo en cuyo marco siga trabajando sobre su situación y en el que pueda ser escuchada. Esto puede parecer mínimo pero es fundamental. Como en algunos lugares estos problemas están invisibilizados vamos a reactivar el Programa de Prevención de Violencia Familiar, ya que por ahora llega sólo a los centros urbanos más grandes y que tienen los recursos a mano. Hay localidades muy pequeñas donde la presencia de la estructura judicial o de las ongs. no está y tienen que recurrir a otros sitios. Por eso apuesto al trabajo en red entre las comunas y al apoyo entre los grupos de mujeres acompañados por la Dirección Provincial.

-¿Y los foros que antes mencionó?

-Justamente serían el comienzo de estas redes. Se trata de reunirnos con los grupos de mujeres, donde los haya, o con las mujeres que quieran integrarse en todas las regiones. Hay que tener presente que no sólo con un programa garantizaremos el acceso a recursos para mujeres víctimas de violencia. La cuestión cultural tiene mucho que ver en sostener las situaciones de violencia, y romper con los patrones culturales es mucho más difícil que articular un programa en todo el territorio santafesino. Los foros serán los espacios de discusión y de construcción en conjunto siempre con respeto por las lógicas de las regiones.

-¿Qué se hizo hasta ahora, desde que Beatriz Fullone fue nombrada en el mes de marzo pasado?.

-Hubo un trabajo muy fuerte en el reconocimiento de las organizaciones y grupos de mujeres, en el recorrer la provincia y en tratar de identificar a quienes comenzaron a reunirse por distintas situaciones. También se integró la comisión tripartita en el área de Trabajo y además un espacio de discusión y de acción, en Rosario, en relación con el Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM). El próximo jueves 31 se lanzará desde la Secretaría de Desarrollo para la Ciudadanía, de la que depende esta dirección provincial, el sistema de protección integral previsto en la ley 26.061 y es intención extender ese sistema de protección a toda la ciudadanía. Ese mismo jueves se abrirá una experiencia piloto de trabajo en red por la no violencia contra las mujeres. Se trata de una instancia conjunta entre el gobierno provincial, los municipios y las organizaciones no gubernamentales del sur de Santa Fe que también irá de la mano de UNIFEM para la capacitación y formación de recursos humanos que puedan identificar y actuar en función de la no violencia. La intención es trabajar estrechamente con el Area de la Mujer en Rosario, donde ya hay una importante estructura, y apoyar con recursos de todo tipo las iniciativas en municipios y comunas estrechamente ligadas a las ongs. La dirección ya cuenta con dos equipos de profesionales, tanto en la ciudad de Rosario como en Santa Fe que incluye a personas con mucha experiencia. A esos equipos hay que potenciarlos.

-Se dice que la Justicia no tiene rostro ni mirada de mujer, como una manera de aludir a los comportamientos inadecuados, descalificadores y estigmatizantes hacia las víctimas de violencia o maltrado.

-Es cierto que el comportamiento de la Justicia responde más a mandatos y a pautas culturales que tienen mucho que ver con cuestiones autoritarias y con una fuerte presencia del varón. Esto es en líneas generales, aunque encontramos algunas actitudes distintas en las regiones y también en Rosario, me refiero a comisarías y a juzgados que tienen otra mirada hacia la problemática de violencia para con la mujer que está atravesando esa situación. En Rosario y en Santa Fe están trabajando muy bien las comisarías de la Mujer. Creo que hay mucho potencial y recursos con los cuales trabajar. Es hora de llevar una tarea articulada. Por eso también vamos a seguir dictando seminarios en el Instituto de Seguridad, la ex Escuela de Cadetes de Policía, para atravesar la formación de quienes estudian y brindar la posibilidad de que miren las situaciones con una perspectiva de género. En este momento se está haciendo en Rosario, pero tal vez se podría generar en la currícula de la formación de cadetes alguna materia que tenga que ver con la perspectiva de género y con los derechos de las ciudadanas. Creo que la tarea de sensibilización, en este y en otros ámbitos, deben completarse con cuestiones más concretas que hacen a la operatividad de las personas que formarán parte de la policía. No se trata sólo de cómo recibir una denuncia sino de cómo mirar y actuar ante un hecho de violencia.

-¿En qué otros programas se trabaja, además del de la violencia abordada desde el terreno de lo doméstico o familiar?

-Hay otros programas que tienen que ver con violencia de género direccionados hacia el acoso sexual en ámbitos laborales y también los relacionados con la generación de espacios de acceso a la ciudadanía de las mujeres. No sólo se trabaja en el tema de violencia sino en aquello que tiene que ver con la producción, con lo laboral, con lo educativo, artístico y cultural. Esta es la política que lleva adelante el gabinete social que integra a todos los ministerios y en consonancia con ello trabaja esta Dirección. En lo que queda del 2008 vamos a apoyar, esto sí en relación con violencia familiar, a grupos de mujeres que actúan en la constitución de hogares﷓refugio en el interior de la provincia. Sólo hay dos que pertenecen a la Municipalidad de Rosario, el Alicia Moreau de Justo y Casa Amiga.