La Asociación Civil Vox envió la semana pasada cartas a los 19 senadores provinciales para mantener reuniones individuales con cada uno de ellos, que apuntan a interesarlos sobre el tratamiento de la ley de unión de parejas estables, que obtuvo media sanción de la Cámara de Diputados el 14 de agosto pasado. Enseguida recibieron respuestas del senador por Rosario, Juan Carlos Zabalza, uno de los seis que pertenece al Frente Progresista; y también de Hugo Terré, que forma parte de la amplia mayoría justicialista. "Nos interesa que el proyecto se trate, y que cada uno siente su posición, lo que no queremos es que se dilate su tratamiento, porque el proyecto ya fue ingresado en el Senado y está en condiciones de ser debatido en las comisiones", indicó Esteban Paulón, secretario de Vox Asociación Civil.

La iniciativa debe pasar por las comisiones de Asuntos Constitucionales y Legislación General y también por Derechos Humanos, Asistencia y Seguridad Social. "Nuestra intención es reunirnos con todos los senadores y plantearles nuestro proyecto. Tuvimos contactos formales con los del Frente Progresista, pero nos preocupa porque allí están en franca minoría, son sólo seis de 19", indicó el activista de los derechos LGTB. Es que el Frente Progresista votó la ley en Diputados, y nueve diputados del Partido Justicialista se abstuvieron, argumentando que era una norma "inconstitucional".

El texto de la carta que Vox envió a todos los legisladores, con la firma del secretario, Paulón, la tesorera Paula Martínez y el presidente, Guillermo Lovagnini, indica: "La Ley, que crea un nuevo instituto jurídico en la provincia, tiene por objetivo brindar la protección y cobertura del Estado santafesino en todas las áreas de su competencia (salud, educación, vivienda, empleo, entre otras) a las parejas que convivan por más de dos años sin contraer matrimonio, sean sus integrantes del mismo o diferente sexo".

Y les recuerda a los representantes de los departamentos que "el principio de la Ley de Unión Estable de Parejas es el trato no discriminatorio, ya que es un derecho que puede ser gozado por todas y todos los habitantes de la provincia".

Paulón apuntó que el objetivo es obtener el tratamiento en comisiones, para que esté en condiciones de llegar al recinto en octubre. "Para nosotros lo peor que puede pasar es que no se trate. Preferimos que se trate y que queden claras las posiciones. Si hay que perder la votación en el Senado, insistiremos el año próximo. Pero queremos que el Senado la debata, y que se pronuncie a favor o en contra", pidió Paulón, quien se mostró optimista. "Yo creo que puede aprobarse, porque habría algunos senadores del justicialismo que votarían a favor, y los que estén en contra, por lo que sabemos, optarían por abstenerse", adelantó.

La estrategia de los activistas es reunirse con los senadores a partir de esta semana, y obtener un compromiso para el tratamiento. Lo primero serán las reuniones individuales y posteriormente, la posibilidad de ir a argumentar en las comisiones que traten el proyecto.