Tuvieron que pasar treinta meses para que Hermes Binner recibiera al bloque de senadores del PJ que le tumbó la reforma tributaria y rechazó todos los amagues de una reforma constitucional. "Fue una reunión amena que se demoró dos años y medio, pero bienvenida sea", dijo el jefe de la bancada, Ricardo Spinozzi, al salir del principal despacho de la Casa Gris. El encuentro parece una tregua política que habrá que ver cuánto dura, si una semana o el año y medio que le queda a Binner en el poder. Un intento para dejar atrás la confrontación y los cruces mediáticos que calificaron al Senado como "la máquina de impedir" y a los senadores del PJ como "golpistas" o los que ponen "palos en la rueda" oficial. "Nos vamos con la expectativa que la relación va a ser mucho más madura de lo que fue hasta ahora", se ilusionó Spinozzi. Mientras que el ministro Antonio Bonfatti se comprometió a generar un ámbito de confianza mutua. "No miremos más hacia atrás. Miremos hacia delante y tratemos de encontrar puntos básicos de coincidencias para transitar el año y medio que nos queda de gobierno", afirmó.

Ya antes de la reunión, Spinozzi devolvió chicanas. "Esos carteles que dicen que el Frente Progresista hizo en dos años más que en 24, es tomarnos por tontos. Pero igual vamos dialogar con el gobierno. Y vamos ponerle a Binner la otra mejilla", se victimizó.

Al mediodía, los senadores ingresaron al despacho del gobernador. Era la primera vez que lo hacían juntos desde que gobierna el socialista. Eran once senadores, porque dos se habían quedado varado en un piquete en la ruta. "Fue una reunión amena, en la que ratificamos nuestra vocación de diálogo para escuchar las propuestas del gobierno y expresar nuestras posiciones", dijo Spinozzi.

La agenda fue tan variada que repasó casi todos los asuntos pendientes: la reforma tributaria, la reforma constitucional y una problemática que los senadores plantearon en la mesa: "La inseguridad, que llevó gran parte de la reunión".

Spinozzi condicionó el avance del diálogo a la confianza mutua. "Cuando nos sentemos muchas veces en esta mesa y nos levantemos confiados que lo que dijimos se va a respetar y cumplir, el diálogo será mucho más fácil", afirmó el presidente del PJ.

"Nos vamos con la expectativa de que a partir de ahora, el diálogo será cara a cara y no a través de los medios. Que los ministros nos van atender el teléfono como una cuestión lógica y normal y que las trabas que encontramos en los Ministerios se superen. Nos vamos con expectativas renovadas que en este último tramo del gobierno la relación va a ser mucho más madura que lo que fue hasta ahora", agregó Spinozzi.