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Intendentes y empleados municipales de la provincia tuvieron ayer el primer encuentro paritario. Lejos de llegar a un acuerdo, el cónclave fue de carácter "informativo" y se acordó un nuevo encuentro el próximo martes. El secretario adjunto de la Festram, Antonio Ratner aclaró que los trabajadores pretenden no ya un porcentaje uniforme de aumento sino "nuevas escalas y mejoras en los básicos", tras lo cual advirtió que de ofrecerles un 6,3 por ciento como a los estatales provinciales "será impresentable y rechazado, con medidas de fuerza" a definirse en un plenario de delegados que se realizará el viernes de la semana próxima.

El dirigente gremial relató a este diario que durante la reunión los jefes comunales admitieron una mejora en sus finanzas pero plantearon que el año ya "estaba cerrado en términos presupuestarios porque incluso la infalción provincial no superó el 20 por ciento de aumento otorgado", lo que fue rechazado de plano por la Festram.

"El año pasado a esta altura muchos municipios pagaban los sueldos de manera desdoblada, ahora esas mismas comunas lo hace el último día hábil del mes anterior. Hay una mejora de la actividad económica, más coparticipación y recaudación", describió el secretario adjunto de la Festram. Los intendentes no hicieron oferta económica alguna y quedaron en formalizarla en una semana.

Ratner adelantó que los municipales no aceptarán un porcentaje fijo para todas las categorías. "Un 6 por ciento para la categoría más baja que gana 1800 pesos no llega a 100 pesos de incremento. No creo que ningún funcionario se anime siquiera a proponerlo porque es impresentable, imposible de ser aceptado", aseguró.