Ya parece un clásico. Cada vez que Cristina Fernández de Kirchner se cruza con Hermes Binner, en algún acto oficial, recuerda los recursos que la Nación invierte en Santa Fe. Y ayer, volvió a pasar la factura y hasta con detalles: "Las transferencias nacionales a la provincia aumentaron el 536 por ciento en ocho años: en 2003, eran de 4.396 millones de pesos por todo concepto. Y hoy, son 27.711 millones", dijo la presidenta. Una cifra superior a los 25.000 millones del presupuesto para 2011 que la Legislatura aprobó en diciembre. El debate se explica: Binner se ha quejado muchas veces porque "la Nación discrimina a la provincia", se queda con sus fondos y por lo tanto ordenó demandar esas deudas ante la Corte Suprema de Justicia. Cristina le contestó con números: "Santa Fe recibe hoy por coparticipación nacional casi 10.000 millones de pesos, incluido el Fondo Solidario de la soja, lo que significa que por primera vez en 200 años de historia un gobierno nacional coparticipa un derecho de exportación con las provincias", tiró.

Cristina estuvo ayer en Sunchales, donde inauguró la sede del grupo SanCor Seguros, en medio del campo, sobre la ruta 34. Un edificio inteligente, de última generación que costó 32 millones de dólares. Y que la presidenta interpretó como una muestra de confianza en el modelo económico. "Nadie invierte 32 millones de dólares en un edificio corporativo si no piensa que el país va a seguir en la senda del crecimiento y la creación de trabajo y de bienes. Es la muestra palmaria de la confianza y el optimismo de nuestros empresarios y un ejemplo del cooperativismo argentino en el país y en nosotros mismos. Nadie va a hacer por nosotros lo que nosotros no somos capaces de hacer", afirmó. En su discurso, la presidenta defendió el proyecto nacional y sus logros económicos, entre ellos el crecimiento al 9 por ciento anual. "Ni viento de cola, ni magia, ni suerte. Suerte tienen los vagos. Estos son los resultados concretos de los que creen en las cosas y trabajan todos los días para lograrlo", insistió.

Arriba del escenario la acompañó Binner, el ministro de Economía, Amado Boudou, y directivos de SanCor, entre ellos el gobernador de Río Negro, Miguel Saiz, un radical alineado con la Casa Rosada desde 2003. Y abajo, tres de los cuatro precandidatos a gobernador del peronismo: Agustín Rossi, Rafael Bielsa y Omar Perotti. Binner había llegado junto con su ministro y elegido para sucederlo, Antonio Bonfatti, el único que habló sobre la inversión nacional en Santa Fe que mencionó Cristina. "Los números deben ser ciertos. Estamos mejor, no lo vamos a negar", dijo Bonfatti.

"En 2003, cuando Néstor (Kirchner) a sumió como presidente, Santa Fe recibía 1.713 millones de pesos de coparticipación nacional. Hoy, recibe casi 10 mil millones, incluido el fondo de la soja, lo que significa que por primera vez en la historia, un gobierno nacional coparticipa un derecho de exportación con las provincias", planteó Cristina. Y después repasó otros números:

* Educación: "Más allá de las obras de infraestructura, los aportes a las universidades y al Fonid (el incentivo docente) en 2003 eran de 270 millones. Hoy, estamos arriba de los 1.000 millones que hemos entregado en materia de recursos".

* Seguridad social: "Estos son los casos emblemáticos", los llamó Cristina. "En 2003, Santa Fe percibía por las jubilaciones y pensiones nacionales 1.318 millones contra los casi 8.000 millones de hoy, más exactamente 7.999 millones, que ingresan hoy a la provincia".

"Este crecimiento con inclusión social se refleja también en el Pami, una institución que durante años fue el emblema de la ineficiencia, la ineficacia y la falta de transparencia. En 2003, los jubilados y pensionados del Pami en Santa Fe recibían 85 millones de pesos en servicio. Hoy, reciben 2.144 millones de pesos en servicios de la salud. Puede parecer una cifra importante, pero lo más importante es que trasunta respeto, dignidad y reconocimiento a nuestros mayores", agregó. * Infraestructura: "De 41 millones de pesos pasamos a 2.690 millones", recordó la Presidenta. Y luego mencionó dos obras que inauguró en los últimos meses: la autopista Rosario Córdoba y la autovía Santa Fe Paraná, a las que sumó el saneamiento de la laguna La Picaza. "Todo esto significa un apoyo al crecimiento económico de la provincia".

* Subsidio a la energía. "Es importante porque tienen impacto en el crecimiento industrial de Santa Fe. En 2003, era de apenas 21 millones de pesos para todo el año. El país no producía y tampoco había tanta gente consumiendo y tanta venta de electrodomésticos. Hoy, el subsidio en generación eléctrica, porque la distribución está a cargo de la provincia, es de más de 2.000 millones de pesos, que también asegura competitividad al comercio y la industria e impacta en el consumo", apuntó.

"Hay muchísimas cifras, pero el total de las transferencias nacionales a la provincia de Santa Fe en el año 2003 eran de 4.396 millones de pesos por todo concepto. Hoy, son 27.711 millones, es decir un 536 por ciento más. Esto si nos fijamos en los recursos presupuestarios", dijo Cristina. "Porque también podemos sumar los aportes del Ministerio de Industria, a través de promociones y otras herramientas que le permitieron a Santa Fe recibir otros 5.130 millones de pesos en beneficios para su sector industrial. En todo el país, se distribuyeron 45.000 millones de pesos y Santa Fe recibió el 11,2 por ciento de esos recursos".

Cristina hilvanó su discurso en la defensa del proyecto nacional y sus logros económicos. "Un modelo que por primera vez en la historia tiene un fuerte mercado interno, pero que también bate récord en la exportación, como nunca lo había hecho en estos 200 años", sostuvo. Ratificó el compromiso del Estado "a sostener las variables macroeconómicas y las políticas activas que nos permitieron alcanzar estos resultados, entre ellas la acumulación de reservas, el desendeudamiento de la Nación, el retorno del crédito. "Y vamos a seguir sosteniendo la demanda agregada, como la asignación universal por hijo que tiene un profundo contenido ético y moral, pero también un profundo sentido económico porque alienta el consumo de los sectores más postergados".

"No es posible desarrollos individuales y autónomos si no hay un proyecto de Nación que involucre a las provincias, los municipios y a la sociedad. Todos debemos poner un grano de arena y cuidar lo que hemos logrado. Nos ha costado mucho construir esto, es más fácil destruir que construir. Por eso hay que profundizar este camino y esa es responsabilidad de todos", concluyó.