Desde Santa Fe

Dos cartas documentos entonaron ayer a Mario Barletta. La Administración de Infraestructura Ferroviaria (Adif) intimó al municipio de Santa Fe a devolver en 30 días las estaciones Belgrano y Mitre, que fueron puestas en valor con fondos de la ciudad, y se abstenga de poner en marcha el tren urbano. El intendente interpretó la ofensiva como un palo en la rueda. "No nos van a llevar por delante", dijo y firmó dos decretos que rechazan las intimaciones de la Adif y ratifican la decisión de recuperar el tren para la ciudad y rescatar el patrimonio ferroviario de un desguace que comenzó en los 90. "Le decimos a los santafesinos que se queden tranquilos, hicimos lo que teníamos que hacer. No vamos a devolver la Estación Belgrano y pondremos en marcha el tren urbano, mal que le pese a algún funcionario que quiere sacar alguna tajada política", planteó Barletta.

Las intimaciones son del 5 de mayo, pero recién se conocieron ayer por copias que consiguieron algunos legisladores santafesinos. Las cartas informan que la Adif resolvió rescindir tres convenios que firmó con Barletta, en 2009 y 2010, porque la llegada del tren urbano cambiaría el destino que se acordó para la Estación Belgrano, cedida sólo como centro de convenciones y ferias. Y advierten sobre "una grave transgresión de la Municipalidad y suya, si el material rodante fuere operado sin tener la autorización de la Autoridad de Aplicación para su desplazamiento".

Barletta intentó resolver el conflicto sin resonancias mediáticas. Primero, para evitar un choque con el gobierno nacional que frustre la vuelta del tren a la ciudad de Santa Fe, y después, para no mezclar el proyecto con los chispazos de la campaña electoral. Comenzaron entonces algunas gestiones reservadas con participación de un diputado nacional del Frente para la Victoria, que se comprometió a destrabar el conflicto. "No queremos chocar con el gobierno nacional porque no tiene sentido. Lo importante es que el tren se ponga en marcha. Y creemos que conflicto ya está en vías de solución", dijo anoche a Rosario/12 uno de los operadores de Barletta comprometido con la propuesta.

Lo que sorprendió a Barletta fue difusión de las intimaciones de la Adif porque los contactos con el gobierno nacional ya estaban avanzados y había una promesa de solucionar el problema. "Es poco entendible la situación, cuando recibimos las cartas documentos no quisimos difundirlas porque no queríamos que se mezcle el proyecto del tren urbano con cuestiones políticas. A lo mejor, alguien tenía esa intención, pero no nosotros", afirmó.

"A los santafesinos le decimos que hicimos todo lo que teníamos que hacer. Que se queden tranquilos. Que de ningún modo nos van a llevar por delante", dijo. La puesta en valor de tres estaciones históricas: Belgrano, Mitre y Guadalupe, fue acordada con la Adif. "Y los acuerdos hay que respetarlos. Puede resultar atractivo generar algún hecho político para lograr adhesiones, pero nosotros tuvimos toda la prudencia de no mezclarlo con el proceso electoral", agregó.

¿Pero existe la posibilidad de que se devuelvan las estaciones de trenes? -le preguntaron.

Quédense totalmente tranquilos. No vamos a devolver la Estación Belgrano. Y vamos a poner en marcha el tren urbano, por mßs que le pese a algún funcionario que está pensando vaya a saber qué cosa o quiere sacar alguna tajada en este sentido", contestó Barletta.