Desde Santa Fe

El ministro de Economía, Angel Sciara, admitió ayer que la provincia cerró sus cuentas con un rojo de 800 millones de pesos en el primer semestre de 2011, aún cuando se mostró optimista que podrá revertir la tendencia en lo que resta del año. Sciara fue el primer funcionario de Hermes Binner que le puso números al desbalance presupuestario, 48 horas después de que su colega de Gobierno y gobernador electo, Antonio Bonfatti, dijera desconocer la magnitud del déficit.

La preocupación por el déficit fue uno de los argumentos que los diputados del PJ le plantearon hace dos semanas en la Legislatura al ministro de Justicia, Héctor Superti, en el debate sobre los cargos para la reforma judicial. "La provincia tiene un rojo de 1.000 millones de pesos acumulados al primer semestre. Ustedes nos piden que votemos 850 cargos y hay otros dos mensajes del Poder Ejecutivo para crear 270 y 220 cargos mßs. Entonces, estamos hablando de 1.200 cargos que demandarßn entre 200 y 250 millones de pesos. No es un tema menor", dijo el diputado Mario Lacava. La cifra no fue desmentida ni por el ministro Superti ni por los legisladores del Frente Progresista.

El miércoles, Bonfatti se mostró sorprendido por el tema. "¿Qué medidas van a tomar con el déficit? Muestra un desbalance aproximado a los 1.000 millones de pesos", le plantearon en un diálogo con El Litoral.

﷓¿Mil millones de pesos? ¿Quién lo dijo? ¿Sciara? Me sorprende ﷓contestó el gobernador electo. Y cuando le preguntaron si el asunto había sido tratado en el gabinete, respondió: "No, no lo charlé con (el secretario de Finanzas Públicas, Carlos) Fernández. No conocía la magnitud del déficit".

Ayer, Sciara aclaró los números: reconoció que "el primer semestre cerró con una diferencia negativa de 800 millones de pesos", pero dijo que "en julio la provincia tuvo ahorro y superávit". Y reveló que "cuenta con los recursos para hacer frente a todos los compromisos asumidos".

Ante otra consulta del vespertino, Sciara atribuyó el desbalance "a las políticas salariales otorgadas en octubre de 2010 y a principios de este año, que no fueron previstas en el presupuesto de 2011". Según el ministro, los aumentos de sueldos en el sector público "presionan mucho sobre el gasto total de la provincia".

"Esa diferencia de los 800 millones tienen que ver con las cifras que figuran en el presupuesto y en cómo se van registrando los gastos y los recursos", explicó. Y allí le pasó una supuesta factura al gobierno nacional. Dijo que en el presupuesto de la provincia figuran "gastos devengados" que tienen "como contrapartida un conjunto de recursos no tributarios" y mencionó las partidas que la Nación debería mandara para financiar parte del déficit de la Caja de Jubilaciones. "En el año, estos fondos sumarían unos 600 millones de pesos, pero hasta ahora la provincia no ha recibido ningún aporte por este concepto. Esa cifra de 800 millones hubiera sido distinta si hubiésemos recibido 350 millones de la Nación por el semestre", especuló el ministro.

Sciara explicó también que "el primer trimestre del año tradicionalmente es deficitario, porque es de baja recaudación; situación que se va nivelando más avanzado el ejercicio fiscal. En el primer trimestre, cuando se otorgó un aumento al sector público del orden del 27 al 28 por ciento, se esperaba compensar incluso por efecto de la inflación, que ahora se ha amesetado y que se ubicaría en el año entre un 21 y un 23 por ciento".