Desde Santa Fe

Hermes Binner cerró anoche su campaña en la ciudad de Santa Fe con un discurso anti K para polarizar las elecciones del 23 de octubre y dar vuelta el resultado del 14 de agosto, cuando la presidenta Cristina Fernández de Kirchner le ganó por cinco puntos (casi 90 mil votos) y lo derrotó en 17 de los 19 departamentos y en algunos de ellos por una diferencia de hasta 30 puntos. "Tenemos que ganar la provincia. Tenemos que frenar a los K en Santa Fe. Y cortarle las alas a la tendencia hegemónica que anida en el PJ", agitó el primer candidato a diputado nacional, Juan Carlos Zabalza. Binner adhirió a la moción con su latiguillo preferido. "Hay que votar en celeste y blanco" y "no el blanco y negro de una Argentina que vive en la crispación", propuso. Binner se ofreció ayer como "la única opción real frente al modelo K", según palabras de Zabalza, quien reveló en su discurso la estrategia del último tramo de campaña: confrontar con Cristina. El acto en la sala de Luz y Fuerza pareció amplificar ese objetivo con algunas consignas de la barra. El canto preferido también estuvo dedicado a los de enfrente: "¡Hay que saltar. El que no salta es un joven K!".

El acto estaba previsto para las seis de la tarde, pero Binner llegó una hora y cuarto después, cuando la sala estaba colmada. La serie arrancó con el discurso de Antonio "Toni" Riestra, que va cuarto en la lista de diputados nacionales y lo siguió Zabalza, ya con un tono más encendido que levantó al auditorio. "Estamos creciendo y vamos a seguir creciendo", anunció Zabalza. Y allí reveló que el objetivo del 23 de octubre es descontar en la provincia los casi cien mil votos que perdió Binner el 14 de agosto. "Tenemos ganar Santa Fe porque somos la única provincia distinta en la Argentina, donde hay un gobierno que funciona con más democracia, más transparencia y más solidaridad. Tenemos que ganar para cortarle las alas a las tendencias hegemónicas que anidan en el interior del PJ y particularmente en quienes gobiernan hoy. Hay que pararlos en Santa Fe", agitó.

Binner profundizó la línea. "Escucho a la señora presidenta de hablar de inversiones por todos lados y placas fundacionales de una obra que se va a construir. Pero nunca la van a escuchar hablar de la desnutrición infantil, de la desocupación, de la pobreza. Siempre habla de números. Nosotros creemos que los números sirven para explicar cosas y si decimos que tenemos diez millones de pobres en la Argentina no podemos decir que este gobierno es exitoso", tiró. Nosotros queremos hablar de todos los números, los de la economía y los de la sociedad, que le permita a la gente vivir con dignidad. Y si queremos sacar esos diez millones de pobres de la pobreza hay dos caminos indispensables: el trabajo y la educación".

En otro pasaje, el candidato volvió a denunciar "los camiones que llegan a Rosario con cocinas, heladeras, colchones, chapas y tirantes" que se reparten en barrios humildes. "Los periodistas me preguntaron si iba a hacer la denuncia y yo les dije que no porque seguramente esas cosas iban a ir a parar lugares donde los necesitan. Y de hecho ocurrió así, hay gente que vive en un rancho y ahora tiene cocina en el rancho. Pero no recuperaron la dignidad, al contrario recibieron el regalito, la dádiva", explicó.

"Queremos construir dignidad, valores. Que la gente se sienta alegre, contenta. Nadie pide un auto dorado. Que los niños tengan la palabra y los jóvenes puedan realizarse". Fue allí cuando Binner coincidió con Zabalza: "Tenemos que ganar en Santa Fe porque acá hay valores. Y sabemos que el vil metal viene recorriendo toda la Argentina", chicaneó. Y cerró con el latiguillo preferido. "Los llamo a votar en celeste y blanco".