La conducción nacional del Movimiento Evita se reunió ayer en Rosario, con el fin de apoyar la construcción de este espacio kirchnerista en el escenario local y marcar la cancha: no sólo en la relación ideológica con el progresismo sino también puertas adentro del Partido Justicialista. Por eso el titular de la Mesa Ejecutiva, Emilio Pérsico, llamó a "la unidad y la profundización del modelo" para "lograr que la provincia de Santa Fe se integre al proyecto nacional y deje de ser un páramo". El dirigente de la Corriente Nacional de la Militancia, Fernando Navarro, reprochó el desempeño de los senadores provinciales santafesinos del PJ por el perfil del proyecto de reforma tributaria al que le dieron media sanción: "Son más funcionales a los intereses de los grupos económicos que a los de los más humildes".

El local de Rioja al 1000 quedó chico para los militantes que se congregaron en esta reunión de la serie de citas previstas fuera de Buenos Aires. El secretario local del Movimiento Evita (ME), José Pepe Berra, dijo que "Rosario es un buen marco para este encuentro porque el Evita está creciendo en la provincia de manera exponencial, acompañando el proceso que se está dando a nivel nacional".

Además de los anfitriones -Berra, Fernando Rosúa, y los diputados Gerardo Rico y Eduardo Toniolli-, vinieron dirigentes de Buenos Aires, Entre Ríos, Santiago del Estero, Río Negro y La Rioja, por lo que el debate general navegó por la política de orden nacional, con la consigna de "unidad y profundización del modelo para ganar en el 2015". Fue entonces cuando Pérsico aludió, tácito, a Hermes Binner, al cuestionar a "quienes atacan las políticas públicas del gobierno nacional, sin observar sus fracasos cuando tuvieron la oportunidad de gobernar".

Rico, presidente del bloque de diputados provinciales del Movimiento Evita Rico, señaló que "hubo una coincidencia total en la necesidad de impulsar permanentemente y acompañar la profundización de este modelo, que es atacado sistemáticamente por los poderes hegemónicos y las corporaciones". Y agregó: "La unidad nos permitirá encarar con decisión el desafío de 2015".

Navarro cargó contra los senadores peronistas por la letra final de lo que votaron como reforma tributaria. "Fueron más funcionales a los intereses de grupos económicos vinculados a la explotación agrícola que a los intereses de los sectores más humildes. En eso hasta tenemos más coincidencia con el gobernador (Antonio) Bonfatti que con esos senadores aunque sean de nuestro mismo partido. Esos podrán cantar la marcha, pero no son peronistas", dijo el diputado bonaerense. Y aunque no quiso inmiscuirse en el debate santafesino -donde Rico y Toniolli preparan una discusión de 80 puntos en Diputados- señaló que esas premisas "son extensivas a todo el Movimiento Evita".

Pérsico resumió su parecer en lo que ve al ingresar a Rosario: "Un casino fastuoso rodeado de barriadas necesitadas. Para no entrar en déficit a la primera crisis, las provincias tienen que sacarle a los que más tienen. Los socialistas dicen lo mismo que nosotros, pero no se animan a enfrentar a los poderes de renta extraordinaria como hace Cristina".

Navarro concedió derechos a Bonfatti a reclamar recursos adeudados al Estado nacional, pero recordó que "con tantos años de gobierno del socialismo, declaman una política popular y en la práctica no resuelve los problemas de los sectores populares". Se basó en el tema seguridad. "La Policía santafesina es de las más bravas, y no se condice con el discurso del socialismo. La inseguridad es responsabilidad de cada provincia y no vemos que ningún socialista se plantee resolverlo", cuestionó.

Por último, ni Pérsico ni el Chino Navarro aventuraron una preferencia sobre el desenlace del PJ local para la elección de diputados 2013: "Los candidatos hay que definirlos 6 meses antes de la elección, ahora hay que resolverle los problemas a la gente".