Desde Santa Fe

La "reunión urgente" que los fiscales federales de Rosario le pidieron al ministro de Seguridad, Raúl Lamberto, preocupados por "las falencias de la Policía en la lucha contra el narcotráfico" y la "política de demolición" de bunkers de drogas sin inteligencia previa, derivó ayer en un cruce político en la Legislatura. La Cámara de Diputados votó sobre tablas un pedido de informes sobre el asunto, pero en el debate, los legisladores del PJ interpretaron la defensa de Lamberto, a cargo de su colega de Gobierno, Rúbén Galassi y sus chicanas por Twitter, como un "intento de interferir la labor de la justicia, calificarla y tratar de amedrentar".

El domingo, Rosario/12 informó sobre la solicitud de los fiscales al ministro de Seguridad, quien al día siguiente evitó polemizar en público con ellos y reivindicó la "relación institucional". Sin embargo, Galassi publicó en su cuenta en Twitter: "Fiscales federales reclaman a Lamberto en un escrito. Si fuera al revés a Lamberto no le alcanza un libro. Fiscales trabajen, no militen". Les sugirió que antes de "desfilar por los medios", se sujeten al trato "institucional" y lanzó sospechas sobre una supuesta estrategia del gobierno nacional contra el socialismo.

Ayer, los dos hechos tuvieron resonancia en Diputados. La Cámara aprobó un pedido de informes del justicialista Héctor Acuña para pedirle explicaciones a Lamberto sobre la mora en conceder la audiencia al Ministerio Público, la "demolición" de los bunker y la cantidad de efectivos de Drogas Peligrosas que "trabajan en Rosario, por turno", entre otras cosas. Y dio ingreso a otro proyecto de Leandro Busatto que respalda a los fiscales de Rosario ante el ataque de Galassi y "repudia las declaraciones del ministro de Gobierno, que a través de redes sociales se dedicó a interferir la labor de la justicia, calificarla, tratar de amedrentar a los fiscales y contradecir lo que pregona en los medios sobre la independencia del Poder Judicial".

El debate en el recinto mezcló las críticas opositoras a Lamberto y a Galassi y la defensa del bloque oficial al primero. "Es vergonzoso, porque no se puede chicanear y faltarle el respeto a los fiscales", tiró Acuña. "Se cansaron de decir que la justicia federal no trabajaba y resulta que cuando los fiscales plantean una reunión para coordinar el trabajo, van y tumban un bunker", agregó.

Acuña recordó que "los fiscales están preocupados por el accionar de la Policía y la demolición de los bunkers de drogas. Advirtieron que sobre esos bunkers hay pedidos de allanamiento y cuando se libran las órdenes para allanarlos, los demuelen. Con lo cual, se pueden perder pruebas y entorpecer la investigación judicial", dijo.

En otro pasaje, Acuña repasó la interpelación a Lamberto en la Cámara y las advertencias que le hicieron entonces sobre la trama narco policial, que "fueron desoídas", dijo. El pase de factura molestó al oficialismo. El radical Santiago Mascheroni chicaneó desde lejos, con el micrófono apagado. "Si no quieren escuchar, no escuchen. Yo no acepto mordazas", retrucó el legislador del PJ. "Y si quiere una interrupción, pídala. No le voy a permitir que me falte el respeto. Porque lo que han hecho son payasadas, en el manejo de la información y en la lucha contra el narcotráfico. Hacen payasadas con un ministro que ofende la inteligencia de los fiscales, que le piden una audiencia para ponerse de acuerdo en el trabajo y no le dan la audiencia. ¿Eso es serio?", preguntó.

La vicepresidenta de la Cámara, Inés Bertero, intentó interrumpirlo: "Vamos a ajustarnos al reglamento".

-Me ajusto al reglamento -respondió Acuña-. ¿Sabe lo que quiero dejar en claro? Que las advertencias que le hicimos a Lamberto eran ciertas. Que no hubo voluntad de investigar hacia adentro de la Policía. Y si lo hubiesen hecho, todas estas conexiones que hoy salen a la luz, hubiésemos ganado tiempo. Esa es la razón por la que impulsamos este pedido de informes, para que nos contesten con la verdad".

La diputada Alicia Gutiérrez defendió a Lamberto. "Todos sabemos que si levantan el teléfono y le piden una entrevista, inmediatamente la tienen. Por lo tanto, esto no es cierto. Los fiscales difundieron el pedido por la prensa, hicieron consideraciones políticas y después dijeron que le pedían una audiencia al ministro, que nunca se la pidieron", dijo. "Todos sabemos quiénes son los fiscales, los que investigan el narcotráfico y los que hacen política. Hay 150 bunkers de drogas en Rosario y 100 en Santa Fe, que han sido denunciados ante la justicia y se pidieron órdenes de allanamientos. Sin embargo, la respuesta fue cero".

Acuña retrucó con los pedidos de informes que Lamberto nunca contestó: "Ustedes no contestan nada. Y cuando lo hacen, responden otra cosa. Y los ministros solo hablan en los medios que le quedan cómodos, que no repreguntan".