Un numeroso grupo de intendentes y jefes comunales del radicalismo se autoconvocó para salir a pedir que la tasa vial, el tributo que intentará implementar el gobierno provincial, sea coparticipable. El reclamo viene a cuenta de que los mandatarios locales dicen haberse visto perjudicados con el resultado del acuerdo paritario con la Federación Santafesina de Trabajadores Municipales (Festram). Por ese motivo, proponen que el gravamen de 32 centavos por litro de nafta o gasoil sea extensible a los municipios y comunas en un 50 por ciento "entendiendo el impacto territorial de la medida y la no afectación de los recursos existentes del gobierno provincial", señalaron.

La idea se plasmó en un documento, al que accedió Rosario/12, firmado por los intendentes de Firmat (Leonel Maximino), Villa Cañás (Norberto Gizzi), Amstrong (Pablo Verdecchia), Funes (Mónica Tomei), Carcarañá (Ramón Soques), Santo Tomé (Fabián Palo Oliver), Coronda (Cristian Bortolotto), Las Rosas (Adrián Carletti), Capitán Bermúdez (Mario Montizanti), Totoras (Horacio Carnevali) y Villa Constitución (Horacio Vaquié). Y adhiere una pléyade de presidentes comunales de pequeñas localidades, a los que --aseguran-- se sumarán más dirigentes del radicalismo en las horas siguientes.

El grupo, que contiene a los municipios de segunda categoría y las comunas, pretende debatir la propuesta con el ministro de Gobierno y Reforma del Estado, Rubén Galassi, y con los diputados y senadores de la UCR. Se considera que los Ejecutivos de primera categoría, como Rosario y Santa Fe, presentan "realidades totalmente diferentes". Por lo que resulta "imposible" continuar planteando una negociación en forma conjunta con ellas. "Proponemos evaluar y realizar mesas paritarias con los sindicatos legalmente autorizados a participar, diferenciadas de aquellas grandes urbes", postulan los socios del socialismo en el Frente Progresista.

En diálogo con Rosario/12, la intendenta de Funes, Mónica Tomei, reconoció que "es muy difícil poder responder a la paritaria" ya que se ven "muy limitados a diferencia de los municipios de primera categoría". La semana que viene, el grupo mantendrá reuniones con legisladores del Frente Progresista Cívico y Social a fin de avanzar con una serie de propuestas. Para el Jardín de la Provincia, por ejemplo, una participación en la tasa vial implicaría más de 300 mil pesos anuales, calculan en esa intendencia.

Pero el documento no sólo reclama coparticipar el posible gravamen. También aboga por una modificación de la normativa provincial para que el destino de los fondos que se transfieren como Fondo de Financiamiento Educativo (FAE) "pasen a ser de libre disponibilidad". Argumentan esa pretensión en que contaban con ese dinero "como un recurso fijo que nos permitía adecuar los desfasajes financieros de la gestión producto de los aumentos de los salarios de los empleados municipales".

Por otro lado, piden rediscutir el porcentaje otorgado a los municipios y comunas respecto del Fondo Sojero, y delimitar un porcentaje automático para el uso de gastos corrientes del Fondo de Obras Menores que permita "tener certezas a la hora de proyectar el año".

Asimismo, los intendentes radicales se proponen definir "criterios claros" junto con Festram acerca de la cantidad de empleados de planta permanente de acuerdo con los índices poblacionales cuantitativos, ingresos reales del Municipio, índices de pobreza, y servicios municipales.