El ex jefe de la policía de Santa Fe, Osvaldo Daniel Toledo, y el ex jefe antinárcoticos del sur santafesino, Gustavo Spoletti, serán citados a declarar ante la justicia provincial por sendas causas de enriquecimiento ilícito. La dirección de Asuntos Internos ya terminó la investigación administrativa, y ninguno pudo justificar su incremento patrimonial que es superior al 60 por ciento de lo que lógicamente pudieron haber crecidos sus bienes con el ingreso que les pagaba la fuerza. El requerimiento de instrucción fue pedido por fiscales del viejo sistema, pero no hay certezas sobre quiénes los juzgará. Un juez de instrucción ya habría adelantado su rechazo para instruir estas dos últimas, mientras las causas contra otros dos policías, Daniel Cáceres y Osvaldo Bejarán, ya están iniciadas en el nuevo sistema penal. En síntesis será un tribunal de alzada el que decida la suerte de estos cuatro expedientes y una decena más -que incluyen a oficiales de la policía santafesina- que ya están concluidos o próximos a cerrarse en Asuntos Internos.

El de Toledo es uno de los doce casos que el fiscal de Cámaras Guillermo Camporini pidió hace dos meses que se profundizara a la Secretaría de Control del Ministerio de Seguridad. La causa sería enviada al Juzgado de Instrucción 4ª de Juan Carlos Vienna, quien habría adelantado su rechazo a la instrucción de estas causas en el viejo sistema.

Toledo fue dos años jefe de la Policía provincial, en coincidencia con la gestión del ministro de Seguridad Alvaro Gaviola: asumió en diciembre de 2009 en reemplazo de Juan Hek, quien a su vez había sucedido en agosto de 2008 a Daniel Cáceres -quien llegó al máximo cargo en el final de la gestión de Jorge Obeid-. Toledo estuvo en la jefatura provincial hasta que fue reemplazado por Hugo Tognoli, en diciembre de 2011, quien fue el jefe antinarcóticos provincial durante la administración de Hermes Binner.

El sumario de Toledo, que se inició el 27 de noviembre de 2008, fue confeccionado en Instrucción 4ª, cuyo titular es Vienna. En marzo de 2009, el jefe policial fue denunciado por el oficial Juan José Raffo, quien luego fue condenado por el robo de una puerta y ahora está procesado por el juez Vienna en la megacausa Los Monos por asociación ilícita.

Toledo admitió que desde 1991 era propietario de tres licencias de taxi, dos a nombre de su esposa y una bajo titularidad de su hijo, y que había recibido una herencia.

Según publicó el diario El Litoral, al comisario retirado le adjudican un campo de grandes dimensiones en Entre Ríos. En este sentido un vocero judicial explicó que la investigación administrativa sobre Toledo, al igual que una segunda, están terminadas. Con lo cual sólo resta que, al menos en el caso de estas dos, sean enviadas a sede judicial para que los magistrados de instrucción del viejo sistema convoquen a los sumariados a indagatoria. Eso si no hay conflicto de competencia: hay quienes opinan que bien pueden girarse estos sumarios que nunca fueron judicializados al Ministerio Público de la Acusación del nuevo sistema.

En tanto Spoletti es hoy el jefe de la Agrupación de Unidades Especiales de la regional de San Lorenzo. Fue jefe de la Brigada de Drogas en Rosario y de la sección Inteligencia. En su causa figura una casa de grandes dimensiones que lo complica en el aspecto patrimonial. Su caso está en la órbita también del juzgado de instrucción de la 4ª nominación.

La incumbencia en el nuevo o el viejo sistema no es una polémica menor: en los últimos días el caso de Cáceres y el del comisario Bejarán ingresaron por la Fiscalía de Delitos Económicos y Complejos que en Rosario conduce Sebastián Narvaja. "Hasta ahora los casos estuvieron en la Dirección de Asuntos Internos. La ley de transición dice que la competencia se define al momento en que se avisa al sistema penal competente. Al nunca haber tenido estado judicial, la incumbencia la tiene el nuevo sistema penal", expresó el fiscal. Desde la vereda de enfrente remarcan que el pedido de informes a cada dependencia donde constan bienes de los efectivos investigados se hizo con la comunicación y vista del juez de instrucción, con lo cual son quienes deberían seguir investigando.