"Fue mi mejor partido desde que juego en Central. Y también es la primera vez que logro convertir dos goles en un partido". A José Zelaya, el hombre gol de los auriazules en tierras bahienses aún le dura la alegría por su notable contribución a una victoria que reclamaba la patria centralista. Atrás quedó el año y diez días sin convertir goles. Un embrujo de 1000 minutos sin darle un pase a la red que se cortó en un estadio en el que Central nunca había podido anotar ni ganar.

El último gol del tucumano de San Miguel se había registrado por última vez el 4 de marzo de 2007, en el triunfo por 3 a 2 ante Lanús por la cuarta fecha del Torneo Clausura del año pasado. Desde entonces, al pibe de 20 años el arco se le achicaba cada día más y las chances de jugar aparecían en cuentagotas. "Fue una linda noche y por suerte pude devolverle al cuerpo técnico toda la confianza que me dio durante la semana", dijo en referencia a Madelón y compañía, quienes lo bancaron para que ingrese en lugar de José Vizcarra.

Sobre los goles que convirtió ante Olimpo, sostuvo que "en el primero encaré por el medio y me quedó justa para darle al arco. Me ayudó que el arquero -Cauterucci colaboró para que se colara en su arco- estaba adelantado y la pelota lo superó. En el segundo, sólo tuve que empujar un gran pase de Martín (Arzuaga) y nada más".

Tras el partido la delegación canaya abandonó la ciudad del sur de la provincia de Buenos Aires y hoy volverá a los entrenamientos en Palos Verdes, luego del sábado libre que el cuerpo técnico dio a los futbolistas.

Las primeras prácticas de la semana irán aclarando el panorama sobre los lesionados, especialmente con Mariano Messera. El volante creativo se perdió los últimos dos partidos del equipo y está previsto que entrene a la par de sus compañeros para pelear por un lugar en el choque del sábado ante Banfield.

El posible retorno de Emiliano Papa es otro de los puntos que quedarán establecidos con el correr de los entrenamientos. El lateral-volante sufrió una distensión muscular leve y por precaución se lo cuidó ante Olimpo y no tendría inconvenientes en jugar si Leonardo Madelón lo considera oportuno.

El mismo camino transitará Walter Ribbonetto, quien sufrió un esguince de tobillo el viernes pasado, y según confirmó el doctor Carlos Lancelotti, también estará en óptimas condiciones para enfrentar al Taladro.