3 Central: Alvarez; Raldes, Ribonetto, Braghieri, Papa; Costa, Borzani, Paglialunga, Cristian González; Zelaya, Vizcarra. DT: Leonardo Madelón.

0 Arsenal: Cuenca; Brau, Mosquera, Matellán, Espínola; Garnier, Casteglione, Pellerano, Yacuzzi; Gómez, Leguizamón. DT: Gustavo Alfaro

Goles: PT: 12m Borzani (C), 22m Cristian González (C) de penal. ST: 37m Vizcarra (C).

Cambios: PT: Desde el inicio Carrera por Brau (A) y Andrizzi por Pellerano (A), 18m Bottaro por Garnier (A), 21m Calgaro por Borzani (C), 28m Belloso por Zelaya (C), 35m Messera por Raldes (C).

Arbitro: Rafael Furchi

Cancha: Central

Atento al martirio estadístico que persigue a Central de un tiempo a esta parte, el triunfo de ayer fue el más importante del año, no por la producción futbolística, sino por las consecuencias: el canaya le sacó cinco puntos de ventaja a Racing en el promedio e igualó a Colón, quedando entonces a sólo dos unidades de Ñuls. Y si a ello se apunta que el partido ante Arsenal lo resolvió en los primeros 22 minutos de juego, bien puede soslayarse que anoche los hinchas encontraron en Arroyito todo lo que fueron a buscar.

La derrota de Racing ante Boca templó el ánimo de hinchas y jugadores. Se presentaba la ocasión de sacarle cinco puntos de diferencia a los de Avellaneda, y esto quedó en clara evidencia por la ambición que mostró Central al arranque del juego, con líneas paradas lo más cerca posible de Cuenca y Cristian González levantando la bandera de la ofensiva con desbordes por la izquierda. El partido arrancó con el canaya dominando, hasta que llegó al gol: fue en la segunda corrida del Kily, cuyo centro terminó en Papa sacando la pelota al medio para Borzani, quien sacó un derechazo de primera que se desvió levemente en Matellán, pero lo suficiente para dejar al uno de Arsenal parado y viendo como la pelota ingresaba por el segundo palo.

Saciada la ansiedad de la gente, el equipo reacomodó líneas hacia atrás, lo que tentó a Arsenal tomar protagonismo ofensivo. Lo hizo por un rato, donde Castellano hizo sus primeras apariciones descolgando algunos centros incisivos y transmitiendo serenidad. Pero a la visita su juego en campo rival le costó caro, porque en la primera contra construida por Central finalizó con Brau tirándole un topetazo dentro del área a Papa que fue sancionado con penal, del cual se hizo cargo con el Kily con toque preciso sobre la izquierda.

Sólo se habían jugado 22 minutos y el canaya tenía en sus manos el partido resuelto con inesperada facilidad. Fue entonces cuando surgió como dificultad sostener lo ya construido por 70 minutos más, y de eso se hizo cargo el equipo con sostenida suerte. Es que así como Zelaya lo tuvo para definir en claro mano a mano, Yacuzzi hizo estrellar la pelota en el travesaño, dejando en claro que la visita aún quería vender algo más cara la derrota.

Obligado en cambiar lo hecho hasta aquí, la visita salió a jugar el segundo tiempo con más hombres de oficio ofensivo al ingresar Carrera y Andrizzi. A lo que Central respondió siendo menos vertiginoso con la pelota, y de eso se encargó Papa, que no sólo supo hacer la pausa en el medio, sino también que fue electrizante cuando desbordó por la izquierda, abriendo los caminos a Cuenca con centro al área chica, aunque tanto Vizcarra como Zelaya no estuvieron en sintonía al nivel del volante que pertenece a Vélez.

Algunos arrebatos ofensivos generaron suspiros en los hinchas canayas, pero en el balance los auriazules pasaron una noche tranquila, sacando diferencias en pocos minutos y celebrando sobre el cierre una volea goleadora de Vizcarra (centro de Papa) para marcar el tercero. Fue, entonces, una encuentro de emociones sostenidas donde Central terminó donde tanto aspirada: en la mismo posición que Colón en el promedio.