Tan necesarios como son los puntos para el primer equipo son los billetes para la tesorería de Central, que en los próximos meses debe afrontar gastos por el orden de los cinco millones de dólares. De ahí que el asesor Manuel Usandizaga atiende en Buenos Aires las preocupaciones contables de la entidad. Para dar cobertura a lo firmado, el club se presta a transferir a Jorge Broun y Guillermo Burdisso, este último con futuro en Italia. El arquero, en cambio, es pretendido por Boca. Aunque en Arroyito nada dirán hasta que el club asegure su permanencia en la categoría.

Una vez resuelta la situación de Central en la divisional Miguel Russo quizás busque nuevo destino para su futuro profesional. El presidente Horacio Usandizaga intuye de las dificultades que se presentarán con el entrenador a la hora de negociar su permanencia en el banco "canaya". Aunque más inquieto está el Vasco por los números del club, los cuales amagan con entrar en rojo al frustrarse la venta de Milton Caraglio (operado de ligamentos). En rigor, un colaborador del presidente confió a este diario que Central necesita cinco millones de dólares para llegar a fin de año, sin contemplar en ese presupuesto fondo alguno para la llegada de refuerzos.

Precisamente de esto se ocupa Manuel en Buenos Aires, donde estuvo apuntalando la venta de Broun a Boca, como así también la de Burdisso, en esta caso al Inter de Italia, donde juega su hermano Nicolás. El pase del arquero a la entidad xeneize creció en las últimas horas, al descartar Carlos Bianchi, manager de Boca, el arribo del uno de Tigre, Islas.

Si bien Central todavía no pagó el pase de Guillermo Burdisso, Manuel Usandizaga está próximo a sellar su cesión al Inter de Italia, gestión que se conversa con el representante Fernando Hidalgo, quien representa a su hermano Nicolás. "Para llegar a septiembre necesitamos tres millones de dólares; y luego dos millones más para pagar lo comprometido hasta fin de año", reconoció un colaborador del Vasco, quien omitió dar declaraciones formales por no tener "autorización del presidente".

El plantel de Central es uno de los cinco más caros del fútbol argentino, de acuerdo a los contratos firmados con los jugadores, algunos de los cuales perciben 700 mil dólares por año. La campaña del equipo no tiene simetrías con la inversión destinada por el Vasco al fútbol profesional, por lo que se viene una reducción en el número de contratos, como así también en los montos destinados para sueldos y primas. Por caso, en enero pasado Central destinó casi un millón de dólares en refuerzos, por jugadores que llegaron a préstamo y que seguramente no seguirán.