Cuidan las formas y se respetan mutuamente. Saben que juntos han logrado mucho más de lo que imaginaban, pero en este receso de temporada no comparten criterios. Alarmado por el retraso en la llegada de refuerzos, el entrenador de Ñuls, Roberto Sensini, se muestra visiblemente preocupado. En tanto, los dirigentes aseguran estar realizando todos los esfuerzos necesarios para concretar incorporaciones, pero sólo han cosechado una venta, la de Agustín Alayes al Colo Colo de Chile. Ayer surgió el nombre de un posible reemplazante del defensor. Se aguarda un llamado telefónico de los directivos del Galatasaray de Turquía para cerrar la transacción de Mauro Formica.

Los dirigentes leprosos vendieron a Alayes despreocupados porque consideraban que tenían reemplazante en la cantera. Los pibes Lema, Fideleff y Machuca -juzgaban algunos miembros de la comisión- eran dignas alternativas para suplir la ida del ex Estudiantes.

Sin embargo, Sensini dejó bien en claro su parecer y puso las cosas en su lugar. Boquita aclaró que cada titular que se vaya deberá ser reemplazado por otro titular. Por esa razón, ahora el entrenador pretende el arribo de un defensor. Surgió el nombre de Ignacio Canuto, ex Argentinos Juniors, que juega en el Maccabi Haifa de Israel.

En tanto, el escaso dinero con el que cuenta Ñuls dificulta la llegada del delantero de Racing, Claudio Bieler. Sensini reconoce el esfuerzo de la dirigencia, pero no vislumbra a su equipo sin esa incorporación. Si el entrenador se mantiene firme en su tesitura de buscarle sustitutos a todos los jugadores que sean negociados, los dirigentes tendrán que sumar un enganche cuando se concrete la venta de Formica al Galatasaray. Ñuls ya le pidió al club turco que revea el modo de pago de la transferencia y espera un llamado desde Europa para cerrar definitivamente el pase. Se resolvería en los próximos días.