Diego "El Panadero" Ochoa, líder de la barra de Ñúbel, podría ser procesado por una causa que investiga un ataque a balazos a un custodio de una confitería bailable, ocurrido el 14 de noviembre de 2010. La jueza de Instrucción Nº 5, María Pérez Vara, resolverá hoy si procesa de Ochoa, apuntado por la víctima como autor de los disparos, aunque el dueño del paraavalancha rojinegro logró oportunamente su rápida libertad al ofrecer como prueba las imágenes de las cámaras de seguridad de su domicilio, donde se encontraba, según afirma, al momento de la balacera al custodio Sebastián González.

Una fuente de la investigación anticipó a este diario que hoy se resolverá la situación judicial de Ochoa en el expediente que investiga la balacera desatada frente a la confitería bailable ubicada en Balcarce 215 en la madrugada del 14 de noviembre de 2010. En el ataque recibió un tiro en la pierna derecha el custodio González, quien aseveró ver visto a Ochoa disparar mientras pasaba frente al boliche en una motocicleta.

Tras la denuncia se libró la captura de Ochoa, quien dos días después se presentó en el juzgado y ofreció como prueba las imágenes de las cámaras de seguridad de su domicilio para demostrar dónde se encontraba en el momento de los balazos a la confitería Athipyko. El video muestra a Ochoa en su casa acompañado por una decena de amigos, los cuales luego prestaron declaración.

Los abogados del líder de la barra leprosa exigieron luego pericias sobre la computadora que capturó las imágenes del circuito cerrado de televisión, aunque la verificación se hizo en el domicilio del barra y no se substrajo el disco rígido que contenía la información. Mientras que las pericias sobre las armas de fuego secuestradas a Ochoa dieron negativo, lo que llevó al barra a requerir su restitución, algo que aún la Justicia no realizó.

La investigación del ataque al custodio se direccionó sobre la versión de la víctima, quien aseguró ser amigo de Matías Pera, el ex barra leproso que agredió al "Panadero" por la espalda en las tribunas del Coloso del Parque el 4 de setiembre de 2010, ocasión de un encuentro nocturno que animaron Ñúbel e Independiente. El custodio apuntó a Ochoa como autor de los disparos, en supuesta venganza por su relación con Pera, quien dos meses antes había participado del fallido golpe contra el liderazgo del "Panadero" sobre la hinchada rojinegra.

Por el contrario Ochoa, al elevar las pruebas para negar su participación en el hecho, abrió otra hipótesis, que señala los vínculos de quienes fueron sus compañeros de tribuna con el narcotráfico, entre ellos el fallecido Maximiliano "El Hijo del Quemado" Rodríguez, como posible explicación del feroz ataque del que fue víctima el custodio.

Aunque la conjetura del "Panadero" no fue investigada en el expediente. Según confirmaron a este diario, hoy se resolverá la situación judicial de Ochoa, quien por la causa quedó detenido solo tres días, tiempo que se tomó la Justicia para evaluar las pruebas presentadas.