La clave es mantener la calma. Central tiene todo para conseguir el ascenso, por virtudes propias y penurias de rivales que no están a la altura de la gran campaña del equipo canaya. Faltan siete fechas aún, muchísimo en cualquier torneo, de una o dos ruedas. Pero el elenco dirigido por Miguel Angel Russo sacó una ventaja indescontable, reconocida incluso por directores técnicos y jugadores rivales. Tras trastabillar en un par de partidos, venció con mucho sufrimiento a Crucero del Norte y empató con autoridad y seguridad con Ferro. Ahora, en la próxima fecha, cuando reciba a Defensa y Justicia, tendrá más claro el panorama en base a cálculos de puntos y sabrá con más certezas cuando podrá celebrar la tan ansiada vuelta a Primera División.

Ruso, después de tanto guardárselo, comenzó a admitirlo públicamente. "Yo siempre me sentí de primera con Central, aún en otra categoría", tiró en los vestuarios de Caballito. Fue una declaración para los hinchas, pero también puertas adentro para ponerse de una vez por todas el saco de todos le adjudican en la B Nacional. Con respecto al equipo que enfrentará a Defensa, si bien quedan cinco días para el partido, se especula con la vuelta del delantero Antonio Medina, en reemplazo de Bareiro, que no jugó un buen partido ante Ferro. Si se confirma la sustitución, Russo podrá disponer del equipo que más le gusta y le trajo más alegrías. De paso, mientras avanza el certamen de la B Nacional, llega al cierre con los jugadores que lograron revertir el comienzo oscuro.