El campeón del mundo Carlos "Tata" Baldomir regresó ayer a Santa Fe, luego de que el fin de semana pasado retuviera por primera vez la corona de los welter en Estados Unidos. El boxeador anticipó que la próxima pelea podría ser la última, antes de retirarse del profesionalismo.

El boxeador santafesino llegó, pasadas las 16.30, al aeropuerto de Sauce Viejo, en medio de un imponente operativo de seguridad. Baldomir no hizo declaraciones.

A su llegada a la localidad de Sauce Viejo, al boxeador lo montaron en una autobomba y le acercaron banderas de Santa Fe, de Argentina y de Colón, el club de sus amores. Ahí comenzó, a pleno bocinazo, la caravana del campeón, que acabó ya caída la tarde en el monumento a Carlos Monzón, la gran figura del boxeo santafesino.

El periplo de Baldomir lo llevó por las principales avenidas de Santo Tomé, luego por la cancha de Colón; pasaron por la cancha de Unión, encararon por bulevar, pasaron por el puente colgante y finalmente, por la costanera, llegaron al monumento a Monzón.

En rueda de prensa, Baldomir adelantó que sin importar el resultado podría abandonar la actividad tras su pelea contra el estadounidense Floyd Mayweather, el 4 de noviembre.

"Estaba pensando que puede ser mi última pelea, gane o pierda, pero lo voy a pensar. Sé que si gano hay una más importante que esa, me la van a hacer firmar igual, y sería ante Oscar De la Hoya", afirmó.

El campeón mundial, que retornó al país tras vencer en Estados Unidos al canadiense Arturo Gatti, elogió a Mayweather, pero expresó su confianza en poder vencerlo. "Se le puede ganar, es un buen boxeador y al ser tan bueno no se va a parar enfrente mío, va a boxear. Pero Judah era lo mismo, era zurdo y más difícil, y pude ganar. Incluso Gatti es menos boxeador pero más fuerte", opinó Baldomir.

"Si uno se prepara a conciencia como lo venimos haciendo, por más que sea un buen boxeador, va a llegar un momento de la pelea que voy a poder conectar los golpes y lo voy a poder derribar", agregó.