En el Coloso del Parque, a primera hora de la tarde, Newell's y Central jugarán el primer clásico del año y pondrán en juego cuentas pendientes. Las de Newell's, con ojo de revancha por sus tres últimas derrotas, ante las de Central, con presente exitoso en el fútbol argentino como hacía tiempo no se les veía a los canayas. Pasado y presente jugarán sus cartas, pero lo que más atrae al espectador es el fútbol que practican ambos equipos, con prioridad por ganar, obsesión por tener la pelota, vocación de agredir al rival en cada pase, intención de jugar cerca del arco ajeno. Un clásico con promesa de emociones, renovado de propuestas, con los novatos Lucas Bernardi y Eduardo Coudet como entrenadores, los nombres de la renovación del fútbol de la ciudad. En Newell's vuelven Diego Mateo, Hernán Bernardello, Mauricio Tévez; en Central Mauricio Caranta, Pablo Alvarez y César Delgado.

El entusiasmo por el clásico de esta tarde es superior a los últimos disputados, y que tuvo a Central ganando una y otra vez. El valor agregado que tiene el encuentro de hoy en el parque Independencia es el presente de ambos equipos, con entrenadores jóvenes y por tal ideas nuevas, con ganas de ganar, intenciones que muestran sus equipos en cada partido.

Porque si hay algo que identifica por igual al Newell's de Bernardi con el Central de Coudet es la prédica por "ser protagonista", definición que se traduce en puesta ofensivas generosas, ambición por ganar que se trasluce en cada ataque, incluso cuando no aparece el gol, como les pasó a ambos equipos en la fecha del pasado fin de semana.

En el juego de las comparaciones, Newell's tiene una idea de juego en estado aún de elaboración, con apenas un mes de trabajo y dos partidos como antecedente de Bernardi en el banco de suplentes. Central, por el contrario, es un equipo con un libreto mejor ensayado, y que Coudet logró transmitir en poco tiempo. El canaya explota la velocidad de Aguirre, se apoya en los pies sorprendentes de Cervi y concreta su fútbol en Ruben, el mejor delantero del torneo, por su promedio de gol y versatilidad para resolver en el área.

Bernardi también le tiene poca confianza a la defensa y por eso probó en la semana con Marcos Cáceres de zaguero central, saliendo Leandro Fernández e ingresando Franco Escobar. En el mediocampo, suspendido Villalba, se replanteó con los regresos de Mateo y Bernardello, siendo desplazado el juvenil Daniel Mancini. Tampoco tiene muchas chances de permanecer en el equipo Lucas Mugni, aunque su reemplazante no parece tan claro: Denis Rodríguez o Víctor Figueroa. El ataque leproso, a su vez, se reinventa con la vuelta de Mauricio Tévez en lugar de Martín Tonso.

Si bien Bernardi no confirmó el equipo, Coudet no reparó en las conjeturas del rival. El Chacho quiere que Central realice en el Coloso del Parque el mejor fútbol que ofreció hasta aquí en el torneo, y que lo tiene a cinco puntos de la punta. Central pisará el Coloso con su formación ideal, que luce con los regresos de Caranta por Manuel García, Alvarez por Salazar y César Delgado por Walter Montoya.