La dirigencia leprosa comenzó a mover el mercado de pases al abrochar la llegada de dos laterales: por la derecha, al peruano Luis Advíncula (foto), y por la izquierda, a Nahuel Zárate. El entrenador Lucas Bernardi tiene ahora, y a la espera de más jugadores, un plantel como para ir moldeando el equipo para el 2016. Ambos marcadores llegan a préstamo y al cierre de esta edición se sumaban a la pretemporada que Newell's lleva a cabo en Mar del Plata, para sumarse a los entrenamientos en el día de hoy. Por otro lado, se reabrió una puerta de esperanza a la llegada del central Juan Insaurralde gracias al interés del club mexicano Chiapas, dueño del pase del defensor, por contratar al volante Víctor Figueroa, que no será tenido en cuenta por el técnico rojinegro.

El panorama es más alentador que la semana pasada en el Parque Independencia. El manager Roberto Sensini concretó el arribo de Advíncula, un jugador joven, de selección, con una proyección asombrosa. La opinión es coincidente, es un gran refuerzo. El peruano llega como titular para dejar atrás al pibe Franco Escobar. Por la otra banda, la cosa es distinta. Zárate, ex Boca y Godoy Cruz de Mendoza, no pisa Rosario para ser titular indiscutido. Deberá pelearla con Gabriel Báez, aunque la incorporación tendrá un pie de ventaja ya que el joven de las inferiores leprosas sufrió fractura de peroné y no podrá iniciar el certamen en óptimas condiciones.

Se generó una segunda chance para contratar a Insaurralde. Por eso se frenó el traspaso de Figueroa a Colón de Santa Fe. Los dirigentes del Negro santafesino quedaron masticando bronca, pero para Newell's es sumamente importante la contratación del central, que podría hacer dupla con el experimentado Sebastián Domínguez. Por ese motivo, se retomaron las charlas con Chiapas a la espera de, ahora sí, una solución positiva.