Viernes, 15 de enero de 2016 | Hoy
CULTURA / ESPECTáCULOS › LLEGA A LA CIUDAD UNA PROPUESTA DE JERARQUíA MUSICAL INTERNACIONAL
Esta noche en Animal Rock es la fecha rosarina de una gira de punk rock que, con Boom Boom Kid como anfitrión, trae a la ciudad a la banda parisina La Fraction, desde 1992 desatando pogos a pura poesía y compromiso con causas políticas
Por Beatriz Vignoli
Hoy desde las 21, en Animal Rock (Mendoza 2754), Boom Boom Kid se presenta junto a La Fraction, grupo de punk rock surgido en París en 1992. El show es parte de una gira conjunta del solista argentino y el grupo francés, "Música de Malas Costumbres. Le Petoname Tour 2016", que ya hizo fechas en Buenos Aires y Córdoba, y que luego de su concierto en Rosario seguirá viaje rumbo a Montevideo, Uruguay.
En el ambiente del punk rock argentino es bien conocido el personaje de rastas rubias nacido como Carlos Rodríguez, cantante de Fun People bajo el seudónimo de Nekro, que cambió por Boom Boom Kid (o simplemente BBK) cuando empezó su carrera solista a mediados de 2001. Boom Boom Kid es además el nombre de la banda de rock alternativo que integra Rodríguez (líder y cantante) junto con Ignacio Rezzano en guitarra, Dario López en el bajo y Marcelo Vidal en la batería. El sonido de sus videoclips recuerda por momentos a los Ramones.
El proyecto solista de BBK comenzó con el último disco de Fun People, Angustia, no, no (2000) donde se adjuntaba un single de BBK. Luego apareció el LP debut Okey Dokey (2001) y toda una serie de maxis y singles que reúnen lados B y rarezas, autoeditados por BBK en su sello Ugly/LasFeos Records. Allí editó además su segundo LP, Smiles from Chapanoland (2004) y un disco que compila los singles y algunos lados B titulado The many, many moods of Boom Boom Kid (2005). Otros seudónimos de Carlos Rodríguez son "El Carlo" y "Voom Van Kinder".
Una recorrida por la web revela diversos costados de BBK, que van desde la foto que una de sus fans tomó de su propia cabeza herida por un microfonazo del artista "sebado" (sic) en pleno recital ("ni siquiera pide disculpas"), hasta declaraciones serias en entrevistas a la prensa, en esta vena: "No hay que subirse al caballo. Le hace mal" (se sobreentiende: al caballo). Abriendo cabezas, pero literalmente.
Una bienvenida sorpresa es la presentación en Rosario de La Fraction, una de las bandas mas activas de Europa, que con una intensa voz femenina al frente y sus letras existenciales, poéticas y sociales constituye una parte vital de la escena underground del Viejo Continente. En su sitio web, http://www.lafraction.org/, puede seguirse la historia del grupo a través de los afiches de sus presentaciones, y se informa que ponen el cuerpo a causas políticas como la solidaridad con los pueblos originarios, los de América Latina o con el pueblo de Chiapas en lucha. La banda fue en algunos períodos un trío y en otros un cuarteto, cambiando varias veces de bajista, achicando o agrandando su sección de cuerdas; pero lo que permanece y le da su sello singular es la batería de Boris y la voz de Magalí, siempre arrolladores y contagiosos ambos en su velocidad y convicción.
Además de participar en numerosas compilaciones, produjeron su propio primer Extended Play, Guerre d'espérance, en 1996; dos años más tarde grabaron y coprodujeron con Crash Disques un CD y Long Play, Éponyme, al que siguieron (ya en este siglo) un segundo álbum, Aussi long sera le chemin (2002) y La vie révée (2006). Más recientemente, en 2013, editaron (y autoprodujeron, con la ayuda del sello Feral Ward) el EP Les silences, que incluye la canción "Terre Damnée".
El título inspirado en el de un libro clásico del pensamiento político poscolonial (Los condenados de la tierra, de Frantz Fanon) llevó a esta cronista a traducir al castellano especialmente para esta nota la letra de Terre damnée (Tierra condenada), de La Fraction. Son versos que aluden en sus bellas imágenes apocalípticas a la crisis ecológica del planeta, los presos políticos y las utopías: "Un sol de plomo/ seca la tierra ya dura. / Flota en el horizonte/ el espejismo de un futuro. // Una luz blanca/ infernal, cegadora/ nunca deja de arder/ clara en los rostros pálidos. // Un viento en torbellino/ sacude la naturaleza/ y borra los surcos, / huellas de antiguas culturas. // Una ola que arrasa/ temible y poderosa/ se yergue amenazante/ sobre los pueblos fantasmas. // En el gran templo/ de los mejores augurios/ fuimos millones/ listos para la bella aventura. // Y en la tormenta/ surge del pasado/ un cuento obsesionante/ de olvidadas palabras. // Vuelven y atormentan/ las almas errantes. / Suena la revancha/ de los condenados de la tierra/ y de la tierra condenada. / De los condenados de la tierra/ y de la tierra condenada".
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