Ya está, no va más. Central se retiró del mercado de pases cuando faltan poco menos de dos semanas para el comienzo del torneo. Es decir, el director técnico Eduardo Coudet no tiene de qué quejarse, ya que la dirigencia auriazul le cumplió todos los deseos. Ahora, con algunas bajas de peso, altas que despiertas expectativas y renovaciones de jugadores clave, el canaya se embarcará en el mar de la triple competencia: certamen local, Copa Libertadores y Copa Argentina. Por otro lado, habló César Delgado y no titubeó para afirmar lo que se percibe. "Se pueden lograr cosas importantes", declaró entusiasmado el chelito.

Chacho se abrazó al 4-3-1-2 en la última parte del 2015 y continuará empleándolo en este año. Con ese esquema logró los mejores, deslumbrantes rendimientos por momentos. Mauricio Caranta dejó el arco y Manuel García (que corre con ventaja) peleará por adueñarse del puesto con el uruguayo Sebastián Sosa. En el fondo, sobresale la continuidad de la zaga central. Alejandro Donatti y Javier Pinola se convirtieron en una dupla clave, con aplomo y experiencia. El sector del campo se afianzó aún más con la llegada del experimentado y conocedor del club Mauro Cetto y el joven Esteban Burgos. Es decir, sobra recambio. En los laterales las alternativas ya abundaban. Pablo Alvarez, Ferrari, Villagra, Salazar. Cuatro jugadores de buen pie para dos puestos.

La partida de Nery Domínguez ha sido la más dolorosa. El cinco era en el reciente plantel casi tan importante como Ruben. Equilibrio del equipo, quitaba con firmeza y distribuía con precisión y calidad. Gil Romero llegó de Estudiantes de La Plata a sustituirlo. Sufrió un bajón futbolístico, pero cuando alcanzó un pico de rendimiento fue seguido de cerca por el cuerpo técnico de la selección. Damián Musto siempre es tenido en cuenta en la zona de volante central. Para una sociedad con los delanteros, hay una infinidad de nombres. Colman, Becker, Montoya, Aguirre, Delgado, el refuerzo Battaglia, Lo Celso, Cervi y hasta Delgado. Coudet es la envidia de cualquier entrenador argentino en este punto.

Arriba no hay tanto recambio, pero Ruben y Larrondo se entienden casi a la perfección y son indiscutidos. Llegó Herrera, aunque se conoce poco de su nivel actual, y siempre está la carta de Delgado, que también puede jugar en esta zona.

Por más que se haga el esfuerzo de bajar las expectativas, Central conformó un gran plantel. Y está claro, genera ilusiones, mucho más luego de alcanzar un gran nivel el año pasado. "La experiencia de todos va a ayudar muchísimo, hay jugadores de mucha calidad y jerarquía. Se pueden lograr cosas importantes", asumió el Chelito, en diálogo con Radio Dos. Tampoco se puede tapar el sol con la mano, hay que hacerse cargo del poderío.

Pese a la partida de jugadores clave, Delgado aseguró que "el grupo está bien, fuerte y con ganas de que empiece el torneo". En el año pasado sufrió más de una lesión, punto que dejó dudas sobre su condición física. El delantero completa la pretemporada sin inconvenientes y trabaja a la par de sus compañeros en el predio de Arroyo Seco. "Estoy muy bien, contento de hacer toda la pretemporada", afirmó el ex jugador de Monterrey de México.