El debut de Newell`s en la Copa Santa Fe, con triunfo por penales ante Puerto San Martín, excedió ayer largamente lo deportivo. Las peleas entre grupos que se disputan el liderazgo de la barra rojinegra motivó un importante operativo de seguridad, con la participación de 450 efectivos policiales que custodiaron las inmediaciones del Coloso Marcelo Bielsa. El dispositivo incluyó la restricción del ingreso a siete personas vinculadas a esos grupos, que sin embargo estuvieron a punto de chocar minutos antes de ingresar a la cancha. Esto generó una corrida cuando intentaban agredirse, pero fueron dispersados por la policía, que evitó así un nuevo enfrentamiento. "Hay que trabajar para romper el vínculo de los violentos con los clubes de fútbol", dijo el ministro de Seguridad provincial, Maximiliano Pullaro. A las cuatro personas detenidas el martes, cuando intentaban conseguir entradas para ver el partido, el juez Javier Beltramone les dictó prisión preventiva por 40 días por portación ilegítima de armas de fuego.

Todos los ingresos al Coloso Marcelo Bielsa lucían ayer al mediodía fuertemente custodiadas por los agentes policiales. "Nunca vi tantos controles, es la primera vez que me sacan las zapatillas", comentó un hincha rojiengro, sorprendido por los cacheos, antes de ingresar a la tribuna popular, en la que se encontraban grupos de combate tomando el lugar donde habitualmente se ubica la barra. Durante el partido se pudo ver a un grupo de jóvenes en los paravalanchas, que de tanto en tanto se acordaban de sus eternos rivales, mientras los juveniles en la cancha dilapidaban opciones de gol en el arco que daba a la popular.

Pullaro encabezó el operativo recorriendo permanentemente los lugares donde estaban apostados los agentes. El ministro destacó que trabajaron "mucho" con la dirigencia para que el partido se pudiera jugar. "Lamentablemente, no era un clima normal, pero queremos que las familias vuelvan a la cancha a alentar a su equipo", resumió el funcionario.

Los deseos del titular de la cartera de Seguridad contrastan con la espiral de violencia desatada entre los grupos que pretenden liderar la barra rojinegra, que en pocos días generó los crímenes de Matías Franchetti en inmediaciones del estadio, y de Maximiliano La Rocca, a quien mataron en Pellegrini al 5300, minutos después de salir del club.

La restricción de ayer, solicitada por la dirección de Seguridad Deportiva, y acordada con el Ministerio Público de la Acusación, luego que el martes detuvieran a 27 personas, alcanzó a Matías Pera y Nelso "Chivo" Segovia, sindicados como los líderes de los grupos que se están disputando la conducción de la barra, a Marcelo "Coto" Medrano, Norberto "Alpa" Grillar, Leonel Fernández, Andrés "Junior" Vivas, y Germán Ponce. Cuando Pera, Medrano, Grillar y Fernández quisieron ingresar al estadio por uno de los accesos que estaba fuertemente custodiado por la policía, se cruzaron con otros hinchas e intentaron agredirse. Pero los agentes que se encontraban en el lugar intervinieron y lograron dispersarlos.

"Si entraban, iba a haber problemas", sinceró una fuente del ministerio de Seguridad provincial, minutos después que los agentes policiales impidieran el ingreso a la popular rojinegra de las cuatro personas vinculadas a uno de los grupos que se disputan el liderazgo de la barra, para garantizar la seguridad de los hinchas.

Por los hechos ocurridos el martes, cuando un grupo de hinchas intentaba adquirir entradas en el estadio para el partido contra Puerto San Martín, el juez Beltramone les dictó prisión preventiva por 40 días a Brian Díaz, Osvaldo Leguizamón, Sebastián Carrillo, y Damián Caruso, a quienes les secuestraron dos armas 9 mm y una Bersa 45. Los detenidos contaban con antecedentes de portación.

Otras 23 personas quedaron demoradas para chequear sus identidades, domicilios y si contaban con antecedentes. La fiscalía investiga si tienen vinculación con los robos y amenazas que denunciaron personas que estaban en cercanías del club, además de entrecruzar información con otras investigaciones relacionadas a la interna de la barra.