Miércoles, 7 de mayo de 2008 | Hoy
CULTURA / ESPECTáCULOS › ROSARIO TENDRA EL PRIMER MUSEO DE VISION INTERCULTURAL DEL PAIS, EN EL GALLARDO.
En poco tiempo, habrá un espacio destinado a los conceptos del mundo toba en el Museo de Ciencias Naturales. Fueron elaborados en un relevamiento con la comunidad, basándose en el Consejo de Ancianos. La meta es el reconocimiento.
Por Edgardo Pérez Castillo
Culminados los festejos por la Semana de los Pueblos Originarios, en el Museo de Ciencias Naturales Angel Gallardo continúa gestándose un proyecto que tiene como objetivo primordial generar un acercamiento a la comunidad qom. Desarrollado por los antropólogos María del Carmen Díaz y Edgardo Habibi, en conjunto con Amancio Sosa y Ofelia Morales (líderes de la comunidad), derivará en la creación del primer Museo de Visión Intercultural de la Argentina.
Profesora de la Facultad de Medicina, María del Carmen Díaz comenzó a organizar la cátedra de Salud en la Comunidad Qom, la primera de su tipo en el país. Desde ese momento, la antropóloga tuvo en claro que la participación de los qom era sustancial en el armado del proyecto. "No fue pensada por nosotros para ellos, sino como un trabajo conjunto. Esto empezó hace cuatro o cinco años. Algo fundamental para ellos es tener identidad y sentirse aceptados y apreciados en un criterio de igualdad, y también hace a un concepto integral de salud".
Así, el trabajo comenzó a desarrollarse en el Gallardo, tratando de revertir un hecho histórico: la exhibición de la cultura qom (y de demás etnias originarias) como mera pieza museológica. "Permanentemente ellos habían sido colocados como objetos, hasta los huesos de sus muertos estaban como objetos de museo. A partir de eso, trabajamos para que ellos puedan observar al mundo y comentarle a la gente cómo es la cosmovisión de la comunidad qom", explicó la arqueóloga.
A partir de esa determinación se inició un relevamiento dentro de la comunidad y, basándose en el Consejo de Ancianos, se definió "cómo ellos piensan el mundo, cómo dividen las tierras, cómo clasifican los animales, los vegetales, para qué les sirven". Establecidas esas definiciones, el Gallardo alojará en poco tiempo, en forma de cartelería, las interpretaciones de la nación qom, en lo que constituirá el Primer Museo de Visión Intercultural de la Argentina. "La idea es que esto permanezca y se vayan sumando otros grupos indígenas, para que ellos compartan su mundo con nosotros", precisó Díaz.
La construcción del Museo apunta a revertir la discriminación. "La pobreza es una forma de discriminación, pero más terrible es que te desvaloricen --remarcó la antropóloga--. Más terrible es que nadie sepa quién sos, qué pensás, qué querés, no tener derecho a nada. Creo que es un buen momento para que los argentinos pensemos un poquito más en amplio y tratemos de integrarnos todos los que ocupamos este territorio. Esta es una puerta de entrada".
Mientras tanto, el proyecto toma forma en medio de un contexto general de aceptación de las comunidades originarias, aunque muchas veces ello se limite a posturas políticamente correctas. Al respecto, Díaz apuntó: "La discriminación en Argentina es fundamentalmente de recursos. De acuerdo al nivel económico que tengas por ahí muchas otras características se pasan por alto. Cuando yo era chica los pueblos americanos se estudiaban prácticamente como desaparecidos en la época de Colón, pero por el lado de ellos también hubo un llamado a silencio por cien años, en razón de que sus mujeres eran llevadas como sirvientas, o que por el hecho de ser indígenas los ponían en el cargo más bajo de peones. Entonces ellos trataban de ocultar su identidad. Pero hace unos años los pueblos indígenas de América decidieron romper ese silencio e identificarse".
En tanto, y en lo que a la comunidad qom respecta, aquel silenciamiento estuvo acompañado por una alteración del espíritu guerrero de un pueblo que hoy parece caracterizado por su sumisión. Sin embargo, según analizó Díaz, se trata sólo de una apariencia: "Ningún pueblo es sumiso, simplemente que aguarda su oportunidad. A nadie le gusta que otro pueblo le pase por encima. El pueblo qom, o toba como le decíamos antes, pagó caro ser un pueblo guerrero y defender su territorio. Lo pagó con masacres como la de Napalpí, muy sangrientas. Lógicamente, cuando no tenés poder económico y político, eso lleva al silencio. Pero su política actual no es de enfrentamiento, sino de ir ocupando lugares y ser reconocidos".
Dentro de los reconocimientos, la posibilidad de que su cultura pueda ser transmitida se convierte en un hecho sustancial. "Normalmente cuando se habla de escuelas bilingües lo que se hace es enseñar contenidos españoles, europeos, en lengua indígena. Eso no es bilingüismo, porque una lengua se genera con sus propios conceptos y sobre su interpretación del mundo. Lo que una escuela bilingüe debería tomar es su propia visión del mundo, y que éso constituya los contenidos formales de la educación. Nuestro proyecto también trata de esto, e incluye que vengan narradores de la comunidad a contarles cuentos a los chicos. Se trata de desmitificarlos, de aprender a conocernos".
Claro que ése conocimiento debe producirse además dentro de la propia comunidad qom, evitando así la pérdida de sus valores culturales. "La deuda con el pueblo qom es muy grande. Principalmente le destituimos muchísima gente, por lo tanto le hicimos perder mucha historia. Después, los grupos religiosos nuevamente le cambiaron la historia. Entonces el esfuerzo que en este momento están haciendo los líderes por reconstruir las crónicas y la tradición oral es muy grande. En Rosario queda un solo anciano con la edad suficiente para narrar. Por suerte quedan muchos en Chaco, que son los que van transmitiéndolo. El problema es que los chicos no quieren ser más qom, entonces hay todo un problema de transición cultural. Este proyecto es una colaboración", concluyó Díaz.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.