Resulta interesante apreciar la calma con la que Abel Pintos evalúa su trayectoria. Porque con apenas 24 años, el músico nacido en Bahía Blanca acumula media docena de discos editados, centenares de shows y un envidiable kilometraje en giras. Sin embargo, hay en Pintos una intención de crecimiento y búsqueda permanente, algo que se va reflejando en su cada vez más claro carácter como compositor. Esta noche, a las 21, esa faceta tendrá preponderancia en el concierto que brindará en el Teatro Broadway, show que marcará su retorno a los escenarios locales a nueve años de su última actuación, y que combinará viejas obras con las que se incluyen en su flamante producción, La llave.

Nacido en 1984, a los seis años Abel Pintos comenzó sus estudios de música en Cutral Có. Su familia se asentó en Cutral Có. Su debut ocurriría un año después, cuando interpretó "Luna tucumana" junto a su padre guitarrista. Su primer disco, Herencia, vendió dos mil placas, transformándose en un suceso en su pueblo y gracias a la intermediación de Raúl Lavié, fue contratado por la productora Abraxas de Pity Yñurigarro. Integrante de ese mismo grupo, León Gieco se transformó así en el productor artístico de Para cantar he nacido, primer disco profesional de Pintos, que con 14 años se sumó además a la gira nacional que, bajo el título "Las tres generaciones", realizó con Gieco y Antonio Tormo.

Luego llegarían Todos los días un poco (2000) y Cosas del corazón (2001), que incluyó como invitados a Mercedes Sosa, Domingo Cura y el propio Gieco, y que lo llevó a tres años de giras por todo el país. Sentidos, su cuarto disco como profesional, mostraría su faceta compositiva y lograría el premio Gardel dentro del rubro Folclore Nuevas Formas, galardón que repetiría con su quinta placa: Reflejo real.

Por estos días, Pintos se encuentra presentando La llave, nominado a Mejor Album de Folclore Alternativo en los Gardel 2008, aunque el concierto en Rosario irá aun más lejos. "Los conciertos que estamos haciendo tienen que ver en su primer mitad con La llave, y la segunda mitad del concierto es una retrospectiva de los seis discos".

En ese marco, la mirada retrospectiva es una tarea grata para Pintos, que afirmó: "Me genera mucha emoción. Soy un tipo muy orgulloso de las cosas que digo, que mi carrera me regaló y que pude lograr con mucho trabajo y esfuerzo. Pero sobre todo soy muy agradecido, porque ya pasé diez años de carrera y todavía soy muy joven. Tengo muchos amigos de mi misma edad, o incluso más grandes, que tienen mucho conocimiento en distintas materias, con las carreras a las que se dedican, y sin embargo no tienen el privilegio que tengo yo de poder contar con el apoyo de las personas, de las personas y el público, y no tienen un espacio para poder desarrollar las ideas que tengo. Y con el desarrollo de esas ideas poder adquirir experiencia en lo que me quiero dedicar el resto de mi vida. Me siento muy emocionado de saber que tengo el privilegio de poder contar con ese espacio para poder desarrollarme, aprender y dedicarme a algo en este país, que es tan difícil".

La intención de desarrollo incluye la profundización de una búsqueda, en un artista que continúa consolidando su faceta como compositor. "Estoy empezando a estudiar una cuestión más técnica de todo lo que es la autoría y composición de letras y de música. Eso es una cuestión que me tiene muy atareado y que, creo, me va a tener así por muchos años. Mi intención es poder seguir componiendo canciones que siempre van a nacer desde lo intuitivo y lo emocional, pero además tengo intenciones de poder desarrollarme técnicamente, para el día de mañana ser considerado. Más allá de ser un tipo que pueda lograr o no componer canciones que identifiquen a la gente, también me gustaría que si eso sucede se me considere un profesional de la autoría y la composición. Ya con eso estoy comenzando un camino nuevo", explicó.

Pero no termina allí el horizonte creativo del músico, que adelantó: "Estoy empezando a escribir unos libros, uno de poemas y uno de fábulas, que si Dios quiere y todo sale bien voy a estar editando dentro de un año, o un año y medio".