Creada por los talentosos solistas que, a mediados de la década del 30, debían exiliarse como consecuencia del régimen que se expandía por Europa, la Orquesta Filarmónica de Israel (fundada originalmente con el título de Orquesta de Palestina) es hoy uno de los organismos más prestigiosos del mundo. Y mucho tiene que ver en ese status Zubin Mehta, el famoso músico indio que, en 1981, fue designado como director vitalicio de la Orquesta. Mañana, y en un hecho inédito para la ciudad, esa sociedad desembarcará en el Salón Metropolitano, en un concierto que sostendrá un carácter benéfico, y destinará los fondos a la modernización del Hospital Provincial Centenario.

Referente de la dirección en Rosario, y a punto de celebrar un nuevo aniversario junto al Coro Estable (ver recuadro), Cristián Hernández Larguía resaltó el valor de esta visita como consecuencia del crecimiento de la ciudad. "Cuando yo era chico Rosario era la Chicago argentina, por la mafia y la prostitución. En la actualidad, por su desarrollo urbanístico se ha convertido incluso en una ciudad turística, algo que hasta hace un tiempo era impensado. Y además en una ciudad que puede recibir a un organismo de la categoría de la Orquesta Filarmónica de Israel", apuntó.

Conductor de la Orquesta de Cámara municipal, Fernando Ciraolo profundizó en la importancia del arribo de Mehta, a quien consideró "entre los directores más trascendentes de nuestro tiempo". "Trasciende a la propia fama que tiene la Orquesta completó . El tiene una gran historia, porque la Filarmónica se crea como orquesta en el 36, y él casualmente nace ese año, es como que tienen una historia en común. Después en el 81 fue designado como director vitalicio, y la orquesta logra sus mejores momentos con él".

Asimismo, Ciraolo expresó: "Mehta pertenece a directores que imprimen un sello a cada orquesta. Es la orquesta de Zubin Mehta, con el timbre, sello y calidad de su batuta amplia, generosa y que realmente hace honor para que la música sea un gran lenguaje musical". Por su parte, Hernández Larguía remarcó que "todo lo que puede decirse de Mehta es valorable", y rescató "la forma que tiene de llevar adelante los ensayos, con alegría, logrando transmitir muy bien sus conceptos, ya que es un director muy didáctico".

"Es una batuta muy elocuente, de mucha maestría, de gestos amplios y claros graficó Ciraolo . Es muy preciso y claro en sus gestos. Eso hace que los músicos entiendan muy bien el mensaje que quiere transmitir. Esa es una de las principales virtudes de este músico".

Después de su paso por Brasil y Uruguay, de la dupla de conciertos ofrecidos el pasado jueves en el teatro Gran Rex porteño, y del que esta noche brindarán en el Luna Park, Zubin Mehta y los 121 integrantes de la Filarmónica de Israel llegarán mañana a Rosario con un programa que incluirá obras de Richard Strauss ("Don Juan" y "Las travesuras de Till Eulenspiegel"), Beethoven (Sinfonía Nº 7") y Astor Piazzolla ("Adiós Nonino"). En relación a ese listado, fue Hernández Larguía el que resaltó la lectura que Mehta hace de las obras de Strauss, "y particularmente en `Las travesuras de Till`, a la que él le da una visión muy personal".