Pensado fundamentalmente como un espacio que brinde comodidad a los artistas y espectadores, el Club Imperial llegó para sumar un espacio de características únicas en el circuito cultural de la ciudad. Así lo entienden sus impulsores, que buscan consolidar un perfil de programación que respete un piso de calidad, en una sala apta para 220 espectadores. Intimista, el espacio se construyó a metros de la antigua Misión del Marinero, en la zona del parque de España, y en su lista de actividades ya están planificados las visitas de Jaime Torres, Dante Spinetta, Martín Buscaglia, Gustavo Cordera, Leo Maslíah y Teresa Parodi, entre otros.

Después de una apertura a cargo de los Bulldog y una dupla de shows acústicos, el Club Imperial continuó con su puesta a punto y, esta noche, reabrirá sus puertas con el recital que Marcelo "Gillespi" Rodríguez ofrecerá desde las 22.30. El trompetista presentará su último disco, Gillerama, junto a su banda: Baltasar Comotto en guitarra, Patán Vidal en piano y teclados, Norbi Córdoba en bajo, Javi Martínez en batería, Cabra en voces, Alejandro Franov en instrumentos étnicos y Hubert Reyes en percusión.

Juan Leguizamón, uno de los impulsores del proyecto, explicó que la intención es sostener una programación atractiva en la que, también, habrá lugar para las propuestas de la ciudad. "Vamos a darle cabida a las bandas locales. Vamos a traer artistas de renombre pero también queremos conjugarlo con bandas locales, porque nos parece muy importante. Son bandas convocantes, la gente las sigue, entonces queremos abrir el espectro para que las bandas puedan tocar en un lugar ameno, donde la gente pueda tomar una copa, con un estacionamiento en frente. Que tengan acceso a un lugar de calidad", apuntó.

En ese sentido, la sala se puede amoldar a las distintas puestas, a partir de la posibilidad de retirar algunas de las 220 sillas que se reparten en semicírculo frente a un escenario amplio. "Sin perder el estilo del Club Imperial la intención es adaptarse a cada público, a cada banda", indicó Leguizamón, que además remarcó que la selección de los artistas está vinculada con ciertos parámetros de calidad.

Por otra parte, el Club Imperial no tiene como únicos destinatarios a los fans de la música, según remarcó uno de sus impulsores: "Queremos darle una buena atención al teatro, tanto local como de afuera. Estamos en conversaciones con Favio Posca, queremos traer cómicos stand up, a Coco Silly. Queremos brindarle a todo ese tipo de artistas la posibilidad de venir a Rosario a un lugar distinto. Nosotros partimos de cuidar mucho al artista y al público, para que pueda tener un lugar cálido donde, en ocasiones, después de los espectáculos van a haber noches de club, donde va a tocar alguna banda".

"Tenemos el deseo de que, cada vez más, la gente conozca al Club y quiera saber qué es lo que hay --agregó--. Que entren a la página (www.clubimperial.tv) para ver qué propuestas hay. Nosotros le apuntamos a bandas y propuestas que tienen cierto recorrido, que tienen una cierta calidad y vienen a hacer algo que está bueno. No nos interesa hacer una rockería, porque ya hay lugares para éso, ya hay propuestas de ese tipo en Rosario. Nosotros pusimos muchísimo para lograr que el lugar sea más acorde a una sala, no es un bar con escenario. Es una sala en la que está la posibilidad de quedarse o que se puede acomodar a distintas propuestas".

Muestras de arte, lanzamientos de libros, convenciones o degustaciones (como las "Wine sessions" que se realizarán quincenalmente junto a la vinería Barcelona) irán sumándose a la programación, que pretende ir más allá de los fines de semana. "Esa es la idea --reconoció Leguizamón--. De hecho hay muchos artistas de Buenos Aires que vendrían un martes o un miércoles. Más que nada son días que van a estar direccionados al teatro".