[HTML]TIEMPO DE VALIENTES 7 puntos

Argentina, 2005

Dirección y guión: Damián Szifrón.

Fotografía: Lucio Bonelli.

Música: Guillermo Guareschi.

Montaje: Alberto Ponce.

Intérpretes: Luis Luque, Diego Peretti, Oscar Ferreiro, Gabriela Izcovich, Martín Adjemián, Tony Lestingi, Daniel Valenzuela.

Duración: 112 minutos.

Salas: Monumental, Del Siglo, Shocase, Village.

No cabe duda de que Damián Szifrón es un degustador pasional del cine de géneros. Es ese disfrute el que ha desarrollado televisivamente, a través de la exitosa serie Los simuladores, y el que ahora vuelca cinematográficamente. En El fondo del mar (2003) se dedicó a exasperar al espectador con un suspense creciente, que dejó en claro las buenas cualidades narrativas del realizador. En Tiempo de valientes, Szifrón se arriesga con una variante autóctona del policial cinematográfico y televisivo.

Luis Luque y Diego Peretti encarnan, respectivamente, a un policía deprimido por la infidelidad de su mujer, y a un psicólogo dispuesto a acompañarlo en su tarea cotidiana. La pareja puede ser vista, desde el recuerdo del espectador, como un cruce entre Starsky y Hutch y Bud Spencer y Terence Hill.

Acorde con el tono narrativo de aquellos films compuestos por la dupla italiana, la película de Szifrón es un divertimento de matinée, con diálogos divertidos, escenas de acción, y tramas macabras.

Es, justamente, el clima de una película de Sábados de Súper Acción, aquél ciclo tradicional y televisivo, el que se respira en Tiempo de valientes.

Conviene agregar que el riesgo de dicho tipo de "traslaciones de género" locales, puede cifrarse en los roles estereotipados, e ideologizados, que se les han adjudicado, usualmente, a las fuerzas policiales y delictivas. Sobre todo por el necesario recuerdo que debemos tener del cine "policíaco-divertido" que la dictadura cultivó a través de sagas como Los superagentes o Comandos azules (responsabilidad de directores como Emilio Vieyra, Carlos Galettini y Enrique Carreras), y de films lamentables como Dos locos en el aire (1976) o Brigada en acción (1977), ambos de Palito Ortega.

De todos modos, Tiempo de valientes tiene la necesaria conciencia como para saber diferenciarse de dicha corriente y ratificar, de modo sorprendente, la corrupción policial y los crímenes impunes de los Servicios de Inteligencia del Estado.

Peretti y Luque deberán saber compartir similares problemas afectivos, puesto que los dos sufrirán problemas de pareja, pero también tendrán que sortear una aventura que desenmascarará oscuros mecanismos de poder.

La amistad que el peligro y el riesgo cimenta entre ellos, parece querer prolongarse, como en toda película de fórmula, en futuras entregas.