Hasta el 30 de este mes, de martes a sábado de 10 a 18, en el ECU (San Martín 750) puede visitarse la muestra Cuidado(s), de la artista rosarina Teresa Dauria, que incluye dibujos, una pintura y varios objetos. Formada en la carrera de Bellas Artes, Dauria desarrolla sobre los soportes más diversos una obra cuyo punto de partida es el dibujo. En su taller, la artista colecciona desde hace años diminutas figuras humanas en diversas actitudes, generalmente de mujeres, también de niños. "Algunas son de fotos que tomo de gente por allí, y que me gustan por la posición, el gesto, o la forma", cuenta.

Ella las calca con una técnica proveniente del grabado o del figurín de alta costura, logrando un grado de síntesis propio del retablo narrativo popular y el arte rupestre. El "cuidado" del título se expresa en las cajas de cartón que las contienen como esculturas blandas que evocan las muñecas de trapo de su niñez. O en la gracia decorativa con que las articula en guardas y frisos, en la pieza central de la muestra, que de lejos parece una colorida alfombra abstracta. Pero de cerca revela un entramado ambiguo de emblemas de amenaza y gestos defensivos, sugiriendo un relato que no se circunscribe a la violencia de género sino que busca repensar lo humano desde sus primeras representaciones.

En la imponente arquitectura del ex Banco Nación, se acentúa la fragilidad de las pequeñas figuras, recordatorios de la sensibilidad en un mundo de cosas donde el peligro es olvidarse de la ternura. La de Dauria es una obra para leer detenidamente, concentrándose en los pocos detalles y en su ambivalencia emocional. Una reflexión ética se nos propone desde el título: ¿es el otro alguien de quien cuidarse o alguien a quien cuidar? ¿Tener cuidado o, más bien, ser cuidados?