"Es una banda hermosa, una gran banda", distingue Mike Stern desde el otro lado de la línea, a pocos segundos de iniciada su conversación con Rosario/12, enalteciendo así al trío que lo acompaña en una nueva gira por Argentina: Dave Weckl en batería, Bob Franceschini en saxos y Tom Kennedy en bajo. Y no es un elogio menor el del talentoso guitarrista, un nombre de peso en la escena jazzera internacional que, en más de treinta años de trayectoria, compartió proyectos con Miles Davis, Jaco Pastorius, Stan Getz, Arturo Sandoval y Joe Henderson, entre muchos otros. Lejos de anclarse en sus pergaminos, para Stern es esencial el disfrute con sus actuales compañeros de escena: "Toqué mucho con ellos a lo largo de los años. Con Dave vengo tocando desde hace treinta años, tocamos muchas veces juntos. Es una buena combinación la que hacemos y me encanta tocar con él, es increíble. Con Bob también hace mucho que tocamos, es un saxofonista realmente increíble. Y Tom es uno de mis bajistas preferidos, es sorprendente. Realmente es una banda divertida para mí, que funciona muy bien".

Registrada en el Dvd New Morning: the Paris concert (de 2008), la química que alcanza el cuarteto tendrá su capítulo rosarino el próximo jueves, en el teatro La Comedia de Mitre y cortada Ricardone. "Algunos de los temas que vamos a tocar en Rosario están en New Morning..., pero también hay algunas cosas nuevas --adelanta Stern--. Vamos a tocar algunas canciones de All over the place, quizás otras del disco que grabamos con Eric Johnson. Tocamos muchas cosas que están buenas, incluso a veces tocamos 'Red house' de Jimi Hendrix, que también canto. Pero después tocamos principalmente canciones mías que ya fueron grabadas".

Y si bien la estructura de guitarra-saxo-bajo-batería es la que sostiene buena parte del show, los conciertos del grupo guardan un amplio margen para la improvisación, según anticipa el compositor: "En el jazz es muy común que uno toque con distintas formaciones, pero con este grupo en particular venimos tocando bastante realmente, entonces estoy muy emocionado de poder llegar a Argentina con esta formación. Que además es una formación muy abierta, muy flexible, con la que podemos ir a distintos lugares y tratar de hacer cosas distintas. A veces probamos cosas en dúo con Dave, a veces Bob toca algo al frente, o Tom y Dave tocan juntos a dúo. Todas esas cosas son posibles, e incluso muchas veces las terminamos improvisando a último momento. Estos músicos son de los mejores que conozco, la combinación que logramos es muy divertida, nos divertimos mucho tocando".

"Soy muy afortunado, tuve mucha suerte de poder hacer lo que hago, de tener mi propia banda y girar con grandes músicos --agrega--. He tenido mucha suerte de tocar con músicos asombrosos a lo largo de los años. Por supuesto que tocar con Miles fue una experiencia increíble. Lo que más aprendí de él es el hecho de tocar con el corazón. Y de tener una mente abierta. El era muy abierto".

- En ese sentido, en tus últimos discos abordaste distintos géneros. El jazz es más bien una plataforma.

- Exacto, el jazz es una plataforma. Lo que me gusta es combinarlo con distintos estilos, cosas que me influenciaron en mis primeros años y que nunca abandoné, como Jimi Hendrix por supuesto, o B.B. King, Buddy Guy. Después también escucho mucha música soul, y al momento de escribir siento que esa influencia también surge. Y, recientemente, también me fue influenciando la world music, porque mi mujer (NdR: la guitarrista alemana Leni Stern) combina sus canciones con un sentimiento de world music, tiene una banda de música africana en Nueva York con dos músicos de Senegal. También tocar con Richard Bona ha sido de una gran inspiración para mí.