Sábado, 3 de enero de 2009 | Hoy
Balance
Si en enero de este mismo año se hubiera hecho una proyección de los problemas de nuestra economía, de nuestra poco entendible política y de las cuestiones que más le preocupaban a los argentinos, pocos hubieran previsto un desenlace como el precipitado en este último trimestre.
Entre los factores exógenos, la crisis del sistema financiero mundial desnudó la "preocupación" de los gobiernos de los países del denominado primer mundo.
Por nuestros pagos la cosa se complicó con un agotador conflicto agropecuario, que enfrentó a nuestra sociedad en un una disyuntiva de con el campo o contra el campo tan extrema como irreal y potenciada por la labor mediática de algunos medios, los que encolumnados en una férrea oposición al Gobierno Nacional cabalgaron sobre la especulación política de una oposición fragmentada y sin propuestas, haciendo eje en los nunca reconocidos errores de conducción del binomio presidencial.
La imprevisibilidad, la desconfianza en los organismos de control del Estado, el desmanejo de los índices oficiales de inflación, los manoseos a la AFIP y las dudas sobre el futuro del sistema provisional y los fondos de ANSES a partir del cambio de sistema jubilatorio, nos hacen terminar este año con más dudas que certezas.
Siguen sin resolverse graves denuncias de lavado de dinero, contrabando de valijas y desapariciones de diverso calibre, que incluyen la seguridad personal y nos hacen dudar de la eficiencia de nuestra estructura judicial.
Ser optimista en estas condiciones, es pecar de inocencia, e ignorar una situación de exclusión social que, en un país con el potencial del nuestro, seguirán resultándonos inexplicables. Y la pesada mochila de las leyes de entidades financieras y de radiodifusión, con las firmas de los responsables de la última dictadura.
Nos es posible hacer una apretada síntesis de este año complicado, sin hacer mención a los insistentes reclamos por seguridad que se repiten.
Además, este año calendario no pasará desapercibido para el análisis de las obras públicas, que se recontra anuncian, se exponen o se prometen y se posponen como la terminación de la autopista RosarioCórdoba que ya debería estar terminada, sin que hasta ahora nadie brinde explicaciones.
Angel M. Contestí
Saludos
La Facultad de Humanidades de la Universidad Católica de La Plata, expresa sus cordiales saludos y deseos de felicidad para el año que se inicia, a toda la comunidad educativa y a los lectores de Rosario/12.
Juan Carlos Carena
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