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Dieta maldita

El grotesco incremento en la dieta de los legisladores argentinos es increíble. Parecen ingleses. En las canchas casi todas las hinchadas cantan "el que no salta es un inglés" y nuestros "pobres" diputados y senadores no creo que salten. Lo de ustedes es desfachatado, indigno, aberrante, inexplicable, inaudito, alevoso, descarado, y muestra que tienen la cara muy dura. Es cómico verlos por los medios televisivos explicando y defendiendo un sueldo que el común de los argentinos lo gana en un año y los jubilados en dos. Explicar que trabajan mucho, cuando todos sabemos que muy pocos lo hacen. El 80 por ciento de esta casta elegida para defender al pueblo canjea sus 20 pasajes aéreos mensuales a más de 550 pesos cada uno, sin contar adicionales por desarraigo y otros tantos pasajes terrestres. La verdad me dan asco.

En el país se consume cada vez menos carne vacuna y no es por cuidados estéticos, a la gente no le dan los números y ustedes en un año que pinta difícil se cubrieron. Son unos caraduras. Son unos malditos farsantes sin corazón que se burlan del pueblo que los eligió, de los pobres jubilados y de la mayoría del pueblo trabajador argentino que hace malabares todo los días para salir adelante y también para abonarle el sueldo a ustedes. Son patéticos, desprecian a los argentinos igual o más que los ingleses y los ocupas de Malvinas.

Daniel Ciúffoli

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