Lunes, 4 de agosto de 2014 | Hoy
Te sueño, te pienso
A 6 meses del tristísimo asesinato a nuestro gran amigo y hermano Jairo Trasante ¡seguimos en pie! ¡Seguimos caminando por justicia! Seguimos como hace todos los meses recordándolo, gritando bien fuerte su nombre, porque en el caminar es que nos hacemos, y hacemos que su muerte no quede en vano, su justicia será la justicia de muchos, y en ese caminar andamos.
Aquel terrible 2 de febrero, donde luego de una pelea fuera de Chiringo's Bar, en Dorrego y San Luis, los integrantes del bando rival, no conformes con la pelea que se había dado, siguieron a Jairo, que iba de acompañante en una moto, y decidieron comenzar una persecución de varias cuadras hasta decidir el momento en donde le sacarían la vida. Nunca olvidaremos aquello, nunca pero nunca. Gracias a una rápida acción del juez Dónnola, el 21 de febrero se logró capturar en la localidad de Pérez, la Renault Sandero en la cual se dirigieron para cometer el delito, y al dueño de la misma, de 30 años de apellido Urrutia, al cual nuestro amigo, el que manejaba la moto (testigo ocular) lo declara como el asesino.
Es por eso que siempre exigimos que se lo condene como asesino, como responsable intelectual y material del hecho, porque fue desde el que aportó el móvil para trasladarse como el que apretó de esa maldita arma, que se lo condene por lo que es y no por otra cosa: ¡Un asesino!
Este mes también se cumplieron 31 meses del asesinato de Mono, Jere y Patom (triple crimen de villa Moreno), donde Jere es hermano de Jairo, y Mono y Patom grandes amigos de el y nuestros también. El gran mural colectivo que hicimos en Seguí y Oroño dice que "mientras sigamos luchando ellos seguirán presentes". Conozcan cómo la pibada de un barrio no decidió linchar a nadie sino caminar creyendo tanto en la justicia de los tribunales provinciales como en la de Dios, que amamos y confiamos que ahora tiene 4 ángeles hermosos con Él.
Urrutia ya procesado está buscando la posibilidad de ser libre, revocar la prisión preventiva, y poder durante el proceso judicial estar en libertad, lo que a nosotros nos parece peligroso para la causa y que las cosas no salgan de la manera que esperamos, es por eso que pedimos que se confirme la prisión preventiva y exigimos una justa condena.
Acompáñennos en esta lucha, porque hoy fue Jairo, Mono, Jere y Patom, y mañana puede ser un allegado suyo, el caminar por justicia no es solo por ellos sino para cambiar la realidad en la que vivimos, y que los asesinos estén tras las rejas así también como para que muchos de nosotros volvamos a creer en la justicia del tribunal.
Eduardo Trasante
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