El intendente Miguel Lifschitz consideró ayer que los temas pendientes de abordar en su gestión son el "crecimiento de los asentamientos irregulares y el delito". Para avanzar en esos puntos que "perjudican a la ciudad", y hallar soluciones en el mediano plazo, solicitó asistencia al Gobierno Nacional: "Es un gran desafío que Rosario no puede abordar sola", aseguró. De esa manera, el mandatario local dejó claro que la vivienda y la seguridad son problemáticas concretas en las que Rosario necesitará asistencia. "Necesitamos políticas de viviendas más activas para poder ordenar muchísimos sectores", señaló. Además, consideró que "el crecimiento del delito es uno de los grandes desafíos hacia delante". Ambas cuestiones "no se pueden abordar sólo desde Rosario, se necesita de una decisión política a nivel nacional", concluyó.