El 19 de febrero a la madrugada, la casa de Avenida Francia 1171 se derrumbó. Rosa Cuqui Zaitune vivía allí con su hija, sus nietos de uno y once años y con una tía de 90. En el terreno lindero, la constructora Ruka Kiñe había realizado un pozo para construir un edificio. "Cada vez que llovía, el agua se filtraba por todos lados porque no habían amurado nada, no apuntalaron nada", dice Cuqui, que desde entonces vive con su familia en el hotel Cristal, de San Juan 4065. El jueves, los dueños de la constructora avisaron que no iban a pagar más la cuenta. "Ellos me tenían que alquilar una casa, pero no lo hicieron. Porque quieren que les venda mi vivienda, y yo no lo quiero vender. Quiero que la reconstruyan", afirma Cuqui. El lunes, a las 10, se parará con sus pertenencias en la puerta del hotel, para exigir soluciones. "Me están dejando en la calle. No tengo donde ir ni tengo los medios para pagarme nada", afirma.