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Con el objetivo de construir conocimiento con otros, para dar vuelta la concepción neoliberal de la extensión universitaria, desde la Secretaría de Extensión de la Facultad de Psicología desarrollan tres proyectos en un marco que llamaron Espacios de Formación Integrales Optativos (EFIO). "Derribando muros", ciclo de cine en El Gomecito (centro cultural del hospital psiquiátrico Agudo Avila); "Cuando se lee poco, se dispara mucho", con niños y niñas de Villa Banana y "La Escuelita San Roque: club, infancia y territorio", son los tres EFIO elegidos por concurso.

A la convocatoria de la Secretaría de Extensión se presentaron 16 proyectos, y una comisión evaluadora determinó cuáles recibirían financiamiento. "Nuestro concepto está basado en lo que hacen en el Uruguay, que ellos denominan integralidad, espacios integrales. No sería la idea de transmitir un conocimiento que se aprende en la Universidad a un sector que supuestamente no sabe, sino que el objetivo es construir con otros. Es integral porque tiene una parte de extensión, una de investigación y una de formación académica para los que la llevan adelante", puntualizó el secretario de Extensión, Esteban Fridman. Cada proyecto cuenta con docentes, graduados y al menos cinco alumnos.

El proyecto del Centro Cultural El Gomecito, en el hospital conocido como "el Suipacha", está "enmarcado en la desmanicomialización. La idea es trabajar con internos, externados y gente del barrio", explicó Fridman y aseguró que "la formación de la Facultad está anclada en el profesional liberal, en el consultorio privado" y por eso subrayó el valor de una experiencia vinculada con los equipos de salud del hospital.

"Cuando se lee poco, se dispara mucho" está dirigido a niños y niñas de entre 4 y 13 años que viven en Villa Banada, "para generar un espacio de acercamiento a la lectura, con una perspectiva preventiva".

En la Escuelita de Fútbol del Club Social, Deportivo y Cultural San Roque, en Molino Blanco, el proyecto financiado por la Secretaría de Extensión trabaja para "crear, fomentar y sostener espacios saludables y comunitarios que a través del juego que posibiliten la construcción de lazos en la infancia".

Para Fridman, se trata de encarnar "la extensión como la construcción de un diálogo entre el saber académico y el saber popular, como una de las formas de romper la universidad-isla".