Familias carenciadas de Rosario, nucleadas en el Polo Obrero y los Pueblos Originarios; van a continuar acampando frente al Palacio de los Leones. La decisión se tomó ayer después de que fracasaran los intentos de la justicia por alcanzar un desalojo pacífico de la Plaza 25 de Mayo, donde se encuentras las carpas de la protesta frente a la sede de la Municipalidad de Rosario. Le exigen al gobierno local, entre otras cosas, un "aguinaldo social" de 300 pesos para las fiestas de fin de año.

Las negociaciones con el Ejecutivo municipal habían fracasado cuando los funcionarios transmitieron a los manifestantes que no darían dinero en efectivo porque "esa no es la manera en la que se canaliza la ayuda social". A cambio habían ofrecido vales para que cada familia pudiera retirar para las fiestas un pollo por familia y otros comestibles tradicionales como pan dulce, budines y turrones. Pero la propuesta fue rechazada de plano por los acampantes.

Clausuradas las conversaciones y una vez que se le dió lugar a la justicia para interceda (la protesta además mantiene cortada calle Buenos Aires desde hace varios días); ayer se realizó una reunión, a pedido de los delegados del acampe de la Plaza 25 de Mayo, con la doctora Graciela Sedda ﷓jueza a cargo﷓ y con la participación de profesionales de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos.

Como resultado de dicha reunión se redactó un acta firmada por la Jueza, el Secretario, la Fiscal y representantes del acampe, donde se otorgó una prórroga al plazo para el desalojo. Allí también se le informó a la Jueza sobre los reclamos planteados.