En algo más de un año, el Consejo Asesor para la Defensa de la Vivienda Unica, Inquilinos y PyMEs recibió algo más de 200 consultas por problemáticas vinculadas a los alquileres. Casi el 20 por cieno de los reclamos están relacionados a problemas de indexación que padecen los inquilinos en sus contratos, pese a que "este tipo de prácticas es ilegal. Lamentablemente todavía no se ha creado un órgano que controle y prevenga de este tipo de abusos y que multe a quiénes lo impongan arbitrariamente", cuestionó Ariel D'Orazio, coordinador del Consejo.

D'Orazio presentó ayer en el Palacio Vasallo un informe de Gestión del órgano que coordina dentro de la Oficina Municipal de Defensa del Consumidor. Los resultados son el fruto del estudio de 200 casos de consultas por alquiler que se recepcionaron en esta dependencias, entre el 2 de abril de 2007 y el 30 de mayo de 2008.

El informe revela cuáles son los principales problemas o inconvenientes que padecen los inquilinos de la ciudad. De las 200 consultas el 16 por ciento son motivadas por problemas de desalojo. Casi el 20 por ciento de los reclamos son referentes a problemas de indexación.

Otra consultas realizadas por locatarios son consecuencia de problemas a la hora de entregar las llaves (14%), problemas edilicios (11%), aumentos desmedidos a la hora de renovar (11%) y exigencias abusivas (7%). Respecto al 16% que realizó consultas afectadas por problemas de desalojo, los datos más destacados que se desprenden son: el 43% alquilaba sin contrato y los propietarios, sin previo aviso, les exigieron la restitución del inmueble.

"Esto es posible por la irregularidad que reina hoy en el mercado inmobiliario, ya que muchos de estos inquilinos tenían un contrato previo que no se renovó y que ocasionó que siguieran pagando sin que existiese un contrato vigente que regulará la locación" indicaron.

Un 22 por ciento llegó a esta situación por haberse vencido el contrato y encontrarse imposibilitados de renovar o bien de arrendar otra propiedad, otro 19 por ciento por no poder hacer frente el pago de la locación en tiempo y forma y el 16 por ciento restante por no poder acceder a los montos que se le exigían al renovar. La mayoría de los afectados por los desalojos son madres solas, generalmente desocupadas, que se encuentran a cargo de sus hijos sin ningún tipo de ayuda.