A dos años de la desaparición de Jorge Julio López se movilizaron ayer organizaciones de derechos humanos, sociales, políticas, estudiantiles y gremiales. La marcha unió las plazas San Martín y 25 de Mayo, y exigió la "aparición con vida" del albañil que declaró contra el represor Miguel Etchecolatz.

En Rosario, se concentraron al menos cuatro cuadras de personas que marcharon desde la plaza San Martín, por calle San Lorenzo hasta la plaza frente al Palacio de los Leones, donde se realizaban actividades.

El concejal Juan Rivero junto a Madres de la Plaza 25 de Mayo, abogados patrocinantes de las causas contra represores, Familiares de Desaparecidos y Detenidos convocaron bajo las consignas: "Aparición con vida de Jorge Julio López, cárcel común y condena efectiva a los genocidas, y régimen carcelario de acuerdo con los crímenes de lesa humanidad".

"A 32 años de la desaparición de miles de compañeros todavía la impunidad cobija a muchos de los responsables de las torturas, desapariciones y asesinatos a través de jueces que siguen permitiendo que dichos responsables no estén detenidos donde corresponda, o sea en cárceles comunes", precisaron los convocantes.

El ministro de Justicia, Héctor Superti, señaló que "en el marco de un contexto histórico particular en el que están en marcha causas emblemáticas que implican la actuación de testigos, querellantes y abogados patrocinantes, actores sociales que han bregado sin descanso por esta oportunidad histórica, el gobierno de Santa Fe implementó políticas activas con el objetivo de acompañar a la Justicia en las causas por delitos de lesa humanidad y/o genocidio".

"Con el Programa de Protección de Testigos y Querellantes, el Estado asume el compromiso de proteger a los ciudadanos que son testigos, querellantes y patrocinantes, ya que sus aportes revisten fundamental importancia para el avance de las causas", recordó el ministro.