El grupo de centros de jubilados y otras organizaciones que pide la restitución del ex interventor de Pami Rosario Eduardo Elizalde en su cargo volvió a movilizarse ayer hacia la delegación, pero se fue con un no. Tras la manifestación de la mañana, por la tarde fueron recibidos por dos funcionarios porteños: el gerente de Relación y Atención al Beneficiario, Nicolás Harispe, y el subgerente del área, Franco Carballo. Los funcionarios les ofrecieron "subsidios y mejoras" para sus instituciones, pero no dieron respuesta al reclamo. "No pueden ofrecernos chupetines, como si fuéramos chicos", señaló uno de los jubilados que participó de la reunión.

Por su parte, la directora de la ONG Abuelos Sustitutos, Marta Chimento, aclaró que todo lo que se les ofreció en la reunión fue rechazado. "Nosotros fuimos solamente para pedir la urgente restitución de Elizalde, porque mientras él estuvo al frente de la delegación, éramos bien atendidos. Yo no sé si Zacarías o quien venga, es bueno o malo; sólo sé que con Elizalde estábamos muy bien y contentos. Queremos que las cosas salgan bien porque todo lo que hacemos, se lo vamos a dejar a los jóvenes de hoy, y muchos de ellos son nuestros nietos", señaló la dirigente.

Mientras transcurría la reunión con los funcionarios de Buenos Aires dentro de la delegación, afuera de las instalaciones, un hombre que dijo trabajar para las autoridades de Pami les pidió a los periodistas de los medios que fueron a cubrir la reunión que no hicieran más notas a los jubilados porque no habría cambios sobre las decisiones ya tomadas desde Pami Nación, y Elizalde no volverá al Pami. "Cuando se cumplan los 90 días, Zacarías va a dejar el lugar y se nombrará a otro titular. Cuando llegue el momento, él hablará con la prensa, pero ahora sólo hace lo que le ordenan desde Nación", señaló el singular vocero, y aclaró que "mientras tanto, la delegación tiene que seguir funcionando, y para eso está Zacarías". En la reunión, los abuelos escucharon ofertas, con un trasfondo parecido: la decisión está tomada.

La delegación del Pami volvió a ser escenario, ayer a la mañana, de una movilización de afiliados a la obra social que pudieron por la restitución de Elizalde. A las 15, el actual interventor, Máximo Zacarías, citó a los manifestantes para buscar a un acuerdo. No los recibió él, sino otros funcionarios porteños. Las autoridades ofrecieron "subsidios y mejoras", tales como enfermería y otros servicios que "son temas candentes en los centros de jubilados, porque no existen", comentó una de las asistentes. Lejos de aceptar estas ofertas, los presentes reiteraron el pedido de restitución de Elizalde como interventor. Además, pidieron que la Presidencia de la Nación tome cartas en el asunto.

Elizalde fue separado de su cargo el 9 de enero pasado, a raíz de una denuncia pública del festejo de fin de año que se realizó el 29 de diciembre en la delegación de la obra social. La misma llegó por correo electrónico ﷓con fotos en las que se veía una odalisca﷓ a distintos medios de comunicación. Los denunciantes la habían calificado como una fiesta bacanal que la obra social había pagado, con odaliscas y suspensión de la atención al público. En cambio, Elizalde explicó que fue un brindis de fin de año, hecho con donaciones, y fuera del horario de atención. Además, apuntó a Soledad Recio, del sindicato UPCN, como autora de la movida para desplazarlo.