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Durante la tarde de ayer, cuadrillas de la Empresa Provincial de Energía (EPE) trabajaban en las dos subestaciones que salieron de servicio durante la madrugada del viernes, aunque en una de éstas la situación era "difícil", ya que un grupo de manifestantes "complicaba el trabajo, porque pretendía sustraer materiales desde adentro, para reventa", explicó la vocera de la EPE, Diana Antruejo. Sin embargo, se preveía que para la madrugada de hoy, estaría normalizado el servicio en Pueyrredón y 3 de Febrero, y Brasil y Viamonte.

Antruejo explicó que "se continúa (hasta ayer) trabajando, pero la situación es difícil, porque hay manifestantes en la subestación de Brasil y Viamonte, que complican el trabajo de la cuadrilla". Durante la madrugada del viernes, salieron de servicio estos dos puestos de distribución de la EPE, debido a filtraciones de agua. Ante los cortes de calles por reclamos sociales, la empresa advirtió que "es indispensable que las cuadrillas dispuestas para este operativo puedan transitar sin dificultades y llegar a los sectores que les han encomendado para realizar los trabajos pendientes".

El gerente de Relaciones Institucionales de la EPE, Raúl Stival, señaló que normalizar totalmente el servicio eléctrico en Rosario le llevará a la empresa "por lo menos 48 horas". "Tuvimos muchísimos problemas ayer con el desplazamiento de nuestras cuadrillas, por eso yo le pido a la gente un poco de tolerancia y comprensión porque se está haciendo lo máximo posible frente a un problema tan grave", añadió el funcionario. Y agregó: "Estamos trabajando a destajo y es una lástima que ayer no se haya podido avanzar más porque había piquetes e intolerancia en muchos sectores de la población".

Stival además explicó que las cuadrillas de la EPE están trabajando

acompañadas de personal policial. "Eso tampoco es correcto", dijo. Por otro lado, señaló que la empresa está aplicando a raja tabla el plan de contingencia. "Primero se repone todo lo que sea alta tensión, que es lo que se hizo, luego media tensión que es lo que ya casi está terminado y a su vez se atacan los problemas de baja tensión priorizando lo que sea servicios públicos como hospitales, comisarías, sanatorios y edificios, porque los edificios al no tener luz tampoco tienen agua", detalló.