Icono de la ciudad, el hotel Savoy está a punto de reabrir sus puertas. A partir de una inversión global que ronda los dos millones de dólares, el centenario edificio de San Lorenzo y San Martín -que pasará a ser un cuatro estrellas- ya muestra una fachada revitalizada, mientras puertas adentro se ultiman los detalles que lo convertirán en un elegante alojamiento de tipo boutique, y que pasará a formar parte de la cadena Fën, que se sumó al proyecto en sociedad con el empresario Miguel Rosental. De esta manera se resguarda el edificio de cualquier sueño de destrucción.

Con un extenso historial que tiene entre algunos de sus visitantes ilustres a los miembros del grupo Queen y a Lisandro de la Torre --quien optaba por sus habitaciones durante sus regresos a la ciudad--, el Hotel Savoy sostendrá parte de su estética centenaria (lo que incluye las vistosas arañas, los pisos de madera y su famosa cúpula), que se combinará ahora con un spa, salas de reuniones, centro de negocios y, lógicamente, conexión internet wi fi. Además, habrá lugar para cuatro espacios gastronómicos bien diferenciados, distribuidos en distintos puntos del edificio, y un salón ambientado especialmente para fiestas, con una capacidad total estimada para unas doscientas personas.

Director del grupo Fën, Aejandro Frenkel destacaba esa convivencia estética en una entrevista al diario La Nación, en la que afirmaba: "El proyecto contempla la puesta en valor de los antiguos muebles del hotel y sus espacios internos. También se reutilizarán detalles internos de mampostería y mobiliario, que se conservan en buenas condiciones, y se recuperará un patio interno sobre el que se abre, desde la terraza, una cúpula corrediza con sus engranajes originales, que data de 1902. En muchos casos es más barato demoler y hacer todo de nuevo, pero por lo general esta elección se apoya en el sostenimiento de la identidad del lugar y el significado que éste tiene en su entorno".

De esa manera, quedarán en pie los bellísimos muebles que le daban brillo al lobby, aun en los tiempos en los que el Savoy mantenía abiertas sus puertas aun sin gozar del prestigio de antaño. Conocedores de aquellos tiempos de gloria, y convencidos de poder revalorizar su riqueza arquitectónica y mobilaria, los inversores apostaron a la recuperación del hotel. En algunas semanas más, el Esplendor Savoy se sumará a la propuesta turística de la ciudad, ampliando no sólo la plaza hotelera, sino dándole valor al corredor histórico rosarino.

"El lugar, que reabre con el nombre Esplendor, apuntará al turismo local aunque también fue pensado como para escapadas de fin de semana", dijo Frenkel, quien aclaró que será un hotel cuatro estrellas.

El grupo inversor, ya cuenta con emprendimientos similares en el barrio de Palermo en Buenos Aires y El Calafate.

En esa línea se manifestó Angel Seggiaro, integrante de la empresa constructora Fundar, en sus declaraciones al portal On24. "Como ciudadano me alegro de poder contribuir a ese espacio, resguardar ese edificio de cualquier sueño de destrucción. Creo que lo va a poner en vigencia por los próximos 50 años", manifestó.

La Municipalidad de Rosario, por su parte, se encargó de unificar calzadas y ensanches de veredas en el entorno del Savoy, como parte del Plan Integral de Movilidad Urbana.