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Cuatro prestamistas que actuaban en Rosario y sur de Santa Fe fueron procesados por los delitos de "estafa, adulteración de documento y defraudación" porque al parecer habían pedido la quiebra de Ñuls, informaron fuentes judiciales.

La medida fue dispuesta por el Juzgado de Instrucción de la Quinta nominación contra cuatro hombres de apellido Pérez que regenteaban una financiera y un hotel en Rosario y otros emprendimientos en Uruguay.

La instancia judicial concluyó que los cuatro, en 2007 solicitaron la quiebra del club con un pagaré de 500.000 dólares y otro de 338.000 pesos, con diversas maniobras.

Ese requerimiento había sido previamente rechazado en el Juzgado Civil y Comercial de la 12 Nominación, en juicio ordinario, cuando el grupo intentó cobrar los 500.000 dólares, dinero que actualmente se halla depositado y embargado.

Cuando el caso llegó a segunda instancia, la entidad rojinegra podía recuperar los fondos que le pertenecen y habían sido depositados durante la presidencia de Eduardo José López.

En los considerandos de procesamiento, se indica que la conducta de los prestamistas estuvo dirigida a beneficiarse patrimonialmente a través de acciones fraudulentas afectando documentos, destruyendo parcialmente la pruebas existentes, variando su sentido y significación en documentos de importancia, resultando afectado el bien jurídico del club.

Los procesados habían sido denunciados por integrar una organización encargada de otorgar créditos usurarios a través de la financiera, el hotel rosarino y una sociedad fantasma uruguaya.