En el año de los juicios, Rosario dijo presente: 25 mil personas marcharon ayer desde la Plaza San Martín hasta el Monumento a la Bandera para recordar los 33 años del Golpe Militar. Fue sin dudas el acto más concurrido de los últimos tiempos en la ciudad, marcada este año por el inicio de los juicios por terrorismo de Estado. El tema fue eje de la convocatoria, ya que la marcha se detuvo frente a los tribunales federales de Entre Ríos al 400 para pedir la aceleración de las causas y repudiar los dichos de la jueza federal Laura Inés Cosidoy quien en un reportaje publicado por Rosario/12 confesó su relación personal con el general Leopoldo Fortunato Galtieri, sobre quien dijo no poder abrir juicio de valor porque le había salvado la vida. El pedido de juicio político a la magistrada federal figuró también entre las consignas del documento firmado por organismos de derechos humanos, organizaciones políticas, sociales, sindicales y universitarias.

La nutrida marcha arrancó por calle San Lorenzo y demoró casi dos horas para desembocar por completo en el Monumento. Una vez en el propileo el escenario fue ocupado como históricamente lo han hecho, por las Madres de Plaza 25 de Mayo, Familiares de Detenidos desaparecidos por razones políticas, la Liga Argentina por los Derechos del Hombre, el Movimiento Ecuménico por los Derechos Humanos y la agrupación H.I.J.O.S Rosario. Fueron justamente estas organizaciones fueron las encargadas de ponerle voz al documento.

Entre los primeros párrafos el texto recordaba que "la dictadura instaló el terrorismo de estado, como metodología para la 'reorganización' de nuestro país, para poner a la nación de rodillas ante las potencias del mundo, para aniquilar las conquistas sociales, y desarticular a las organizaciones gremiales, políticas, campesinas, juveniles. La dictadura fue producto de una estrategia integral y sistemática que contó con la participación necesaria y la complicidad de sectores civiles, políticos, empresariales, económicos, sindicales y de la cúpula de la iglesia".

Durante el acto pudieron verse las banderas de la CTA Santa Fe, la de Amsafe Rosario, el Movimiento de Articulación Popular, el Sindicato de Prensa Rosario, Si.Tra.Tel, Biblioteca popular Pocho Lepratti, Movimiento Martín Fierro el Movimiento Evita, la Juventud Peronista Evita, la Unión de Estudiantes Secundarios, el Frente Popular Darío Santillán, la de COAD, la CTA Rosario, ATE, Atilra, la UOM Rosario, La Bancaria, el Movimiento Popular Libertador San Martín, el Partido Comunista Congreso Extraordinario, el MST, la Corriente Clasista y Combativa, el Partido Comunista Revolucionario, el Frente amplio estudiantil Santiago Pampillón, el Movimiento Libres del sur y el Movimiento Barrios de Pie, entre otros.

El texto leído también tuvo un aparte para los ex combatientes de Malvinas, presentes en el acto. "A inicios de los ochenta, como increíble manotazo de ahogados, los militares se toman del histórico reclamo de Malvinas, sometiendo a terribles aberraciones nuestros jóvenes y queridos soldados veteranos y ex combatientes, que defendieron con su vida la soberanía nacional contra el imperialismo inglés -que hoy nuevamente pretende usurpar nuestro territorio marítimo-, a pesar de que a la dictadura nada importaran realmente esas legítimas banderas".

En una breve reseña de los últimos treinta años, el documento recordaba al aparición de casos de gatillo fácil, y hacía incapie especialmente en Santa Fe con "las nueve víctimas que se cobró la policía de Carlos Reutemann y Enrique Alvarez". Por eso se exigía "juicio y castigo para los responsables materiales y políticos de los asesinatos de Juan Alberto Delgado, Rubén Pereyra, Ricardo Villalba, Walter Campos, Yanina García, Graciela Acosta, Claudio Lepratti, Graciela Machado y Marcelo Paccini".

Y finalmente el texto hacia puntual referencia a "este año, que será inicio de los juicios orales contra los genocidas, en el que más que nunca debemos aprender a defender y acompañar, en el marco de la más amplia unidad posible, nuestras conquistas y derechos. Así como llenamos este monumento para exigir el juicio y castigo a los terroristas de estado, debemos estar todos junto a los trabajadores que bajo los argumentos empresarios de "la crisis", resisten a los despidos, suspensiones y baja de salarios". Y dejaba un objetivo final claro "Tenemos que lograr entre todos poner como principal eje de la agenda social la distribución de la riqueza; y desterrar los intentos de quienes pretenden esconder las consecuencias de la desigualdad con políticas de mano dura".